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Usain Bolt, plusmarquista mundial y ocho veces campeón olímpico, estará a prueba por un “período indefinido” en el Central Coast Mariners de la liga australiana de futbol.
“Le damos la bienvenida a Usain con los brazos abiertos y nos mantendremos enfocados en el trabajo que nos ocupa”, dijo Shaun Mielekamp, directivo del club.
Bolt aún no ha sido contratado por su equipo, pues primero tendrá que probar que está a la altura de los estándares de la A-League, la liga profesional de Australia y que cuenta con la capacidad física necesaria.
“Tiene que convencer al entrenador y tener el nivel en el que el entrenador considere que puede jugar a fútbol de forma regular”, dijo el directivo que precisó que “hasta que no entrene con los expertos no sabremos de lo que será capaz”.
“Una vez que apruebe todos los requisitos, estará disponible para la pretemporada”, indicó.
Bolt, de 31 años, se mostró agradecido por la oportunidad en un video grabado divulgado por los medios locales.
“Ha sido un sueño personal el poder jugar fútbol profesionalmente y creo que implicará mucho trabajo duro y entrenamiento para llegar al nivel requerido para jugar y lograr un impacto en la A-League”, expresó el carismático deportista.
El australiano es el cuarto equipo al que Bolt se aproxima para dar el salto al fútbol profesional tras hacer pruebas con el Borussia Dortmund de Alemania, el Sundowns de Sudáfrica y el Stromsgodset de Noruega.
Con su nueva aventura, el atleta mostrará una faceta diferente de su vida contrario a los visto en el documental I’am Bolt, donde el jamaiquino narra cómo fue su preparación para conquistar el oro en los campeonatos del Mundo de 2015 y en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
En el material dirigido por Sabe Turner y Benjamin Turner y disponible en Netflix y YouTube, Bolt se muestra como un joven común y corriente, que a pesar de los logros deportivos y la fama alcanzada, no olvida sus raíces humildes, su pueblo natal Sherwood Content y a sus amigos de la infancia, que pasaron a formar parte de su equipo de trabajo.
Además de llevar a la pantalla la preparación de un atleta de alto rendimiento y que es considerado el mejor de la historia en su disciplina, I’am Bolt desnuda al hombre más rápido del mundo pues muestra sus demonios y sus momentos más complicados.
¿Cómo motivar a un hombre que lo ha ganado todo y que es considerado como el mejor velocista de la historia? Esa es la pregunta que se hacen sus entrenadores y amigos en el documental, pues Bolt comienza a perder el interés por competir y ahora sólo busca descansar y divertirse como una persona normal.
Ahora Bolt parece haber recuperado las ganas por seguir trascendiendo, esta vez, en un deporte diferente al que se ha desempeñado toda la vida. El ex velocista ya no tiene nada que demostrar, pero su espíritu competitivo lo obliga a tomar nuevos retos.
Fuente: Sin Embargo
Source: Deportes