A JAVIER CORRAL, fiel a su estilo de no medir sus discursos, se le ocurrió patear el avispero en la UACH durante el Foro Educativo que encabezó Esteban Moctezuma, el próximo secretario de Educación Pública del gobierno federal y uno de los hombres más cercanos al presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, y es que así, como si todavía fuera un legislador y no el gobernador de Chihuahua, Corral Jurado habló para espetar su opinión, sus razones, y no para hacer política, para mediar, lo que ahora debería ser su chamba como jefe del Poder Ejecutivo estatal, así que ahí delante de todos, dijo que no estaba de acuerdo en la abrogación total de la reforma educativa… y ¡pum! el abucheo fue generalizado.
A Corral se le olvidó que no por estar en la UACH, el escenario era propicio para rechazar que se tumbe la reforma educativa, éste estaba lleno de maestros que han luchado desde el 2013 para derribarla, por lo que el trancazo se escuchó sonoro y al unísono, sin embargo, no es la primera vez que al gobernador se le olvida el tacto político o de plano carece de ello. Ya lo hizo en Cuchillo Parado, cuando les dijo que analizarían si ese poblado coyamense o San Isidro eran la Cuna de la Revolución; lo mismo sucedió en Camargo, en donde les repitió que uno de sus principales orgullosos, David Alfaro Siqueiros, no había nacido en esa cuna de artistas; o cuando dijo en tono burlón y con la violencia desbordante, que tampoco se subiría a una patrulla porque no es policía. Vaya, ejemplos son muchos, y el gobernador no entiende.
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Y EN ESA carencia de tacto político lo que aleja y enfría la relación del gobernador Javier Corral y el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, cuya visita como parte de la gira de agradecimiento podría, por fin, ocurrir la semana entrante, luego de que estuviera prevista desde el pasado 23 de septiembre y nomás no se concretara, por el cambio de agenda del oriundo de Tabasco, quien prefirió darle prioridad a las entidades donde más cómodo se siente y donde la relación con sus gobernantes es más cercana, sin embargo, todo parece indicar que AMLO estaría en Chihuahua antes del 15 de octubre.
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AUNQUE NO VAYA a obtener la dirigencia del PAN Estatal porque los dados están más que cargados hacia un solo bando proveniente de Palacio de Gobierno, los malosos nos comentan que Jorge Puentes, el aspirante incómodo, podría convertirse en algo más que eso y ser una piedra en el zapato para la orden del gobernador Javier Corral, de fingir la democracia y ungir a Rocío Reza como la sucesora de Fernando Álvarez Monge en el despacho principal de las oficinas de la Zarco, y es que por más que le pusieron trabas, el chamaco logró reunir las firmas necesarias y solicitar su registro como candidato a dirigir el partido, pues aunque al final se imponga a Reza Gallegos, lo cierto es que Puentes dejará la víbora chillando, al demostrar cómo el panismo le aprendió el dedazo a su supuesto némesis tricolor.
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HABLANDO DE PUENTES, pero de los fronterizos que unen a Ciudad Juárez con El Paso, los malosos deslizaron que ayer fueron vistos juntos y en una oficina de la planta baja de Palacio de Gobierno, el director del Fideicomiso de Puentes Fronterizos y también secretario de Obras Públicas, Gustavo Elizondo, en compañía del coordinador de Comunicación Social, Antonio Pinedo, ambos, acusados de otorgar contratos de adjudicación directa a empresas de compas o de conocidos, vaya, los dos cojean del mismo mal y chance por eso, los dos están fraguando cómo salir del atolladero bajo el lema de esta administración: “es que los medios nos están extorsionando”.
Source: Columna