Cero pretextos-Costosa factura-Loera exhibido-Festejo desahuciado

AL GOBERNADOR JAVIER Corral vinieron a dejarlo sin pretextos en su cara, y es que el presidente Andrés Manuel López Obrador, al concluir su discurso en la Plaza Mayor, en donde estuvo el sábado temprano, dejó en claro que no importa cuánto le tiren, cuántos frentes armen en su contra o cuánto estén en desacuerdo con él las autoridades estatales, no dejará solo a Chihuahua ni existirán represalias, entregándole al Estado lo que le corresponde legalmente. Lo dijo ante miles de personas que acudieron a su primer evento como Presidente de la República en la capital chihuahuense, con Corral a un lado, sentado, sin aplaudir y con el rostro tieso, mostrándole el tabasqueño al góber cómo se hace política, cómo se interactúa con el pueblo, sin chalecos antibalas de por medio y defendiendo al adversario político, eso sí, dejándolo sin pretextos del berrinche armado contra el expresidente Enrique Peña Nieto. AMLO, fiel a su estilo, le dio una cachetada con guante blanco al gobernador, el único de los 32, que se queja de serlo.
Hay que decirlo, y quien lo quiera ocultar o maquillar sería como tratar de tapar el sol con un dedo: la oleada morena radical instrumento una serie de “no me olvides” al gobernador Corral Jurado, amén de las naturales antipatías creadas por el propio mandatario, como el gremio de transportistas que la víspera había mandado desalojar y para ello se dio la necesidad de repartir algunos macanazos.
Esa factura que pagó Corral Jurado fueron 5 rechiflas y abucheos, combinados con una recordada al 10 de mayo, los cuales quedaron grabados y contabilizados, aunque dicen los malosos que desde el templete esas cinco ocasiones se sintieron infinitas.
Esa mañana, el gobernador tuvo que enfrentar a miles de ciudadanos que hace casi tres años, a pesar de ser morenos o “chairos”, votaron por él para sacar al PRI del Gobierno del Estado, y el reclamo fue unísono: “¡fuera Corral! ¡Fuera Corral!”, gritaban los asistentes, y ahí, como lo ha hecho con otros gobernadores abucheados cuando visita ciertos estados, el presidente López Obrador pidió a los presentes más tolerancia hacia su gobernador, después de todo llegó de manera legítima, sin embargo,  de nueva cuenta, Corral sintió el desprecio popular; observó cómo sus ganas de figurar políticamente le han consumido el gigantesco bono democrático con el que tomó el poder en octubre del 2016. Pero con todo y el alto factoraje político, el mandatario volvió a demostrar que lo que piense o sienta el respetable, le importa poco o de plano nada.
******
CONTINUANDO CON LOS ecos de la visita presidencial, otro que salió señalado y ninguneado, es el súper delegado Juan Carlos Loera, a quien la cúpula de Morena exhibió ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, como un funcionario federal que está más alineado con el Gobierno del Estado de Javier Corral, que con las intenciones de la federación de sacar avante a Chihuahua a través de los programas federales que, se supone, él debe coordinar, además, ahí no terminó el suplicio de Loera de la Rosa, pues el alcalde de Cuauhtémoc, Carlos Tena, volvió a poner el dedo en la llaga y exhibir al mentado virrey ante López Obrador, tales fueron las quejas contra el súper delegado, que a pesar de su función, el tabasqueño ni siquiera lo invitó a subirse al templete y lo dejó abajo, ahí junto a los beisbolistas que sí estaban felices. Así que mientras Loera andaba en las faldas del presídium, el que sí logró subirse fue el senador por Morena, Cruz Pérez Cuéllar, muy cerca del presidente de México, como si ambos enviaran una señal.
******
Y DONDE LAS señales deberían de alarmar y poner en focos rojos al gobernador Javier Corral, es lo sucedido el viernes por la tarde en la presentación de su Segundo Informe de Gobierno en el Centro de Convenciones, ante un salón medio vacío, sin figurones políticos que resaltar y rodeado solamente de los suyos, de los beneficiados a pesar del quebranto en el que ha caído Chihuahua. La burla no se hizo esperar en redes sociales, cuando a través del libro que presenta los logros de la administración y para llenar las páginas, como si de una tesina chafa se tratara (exacto, de esas que no llegan ni a tesis), resaltaron hasta los asistentes al cine indígena o la donación altruista de sangre, hechos que poco tienen que ver con el gobierno y más bien corresponden al altruismo de los chihuahuenses. Además, ahí no acabó el asunto, las redes sociales también se inundaron de memes, burlándose y lamentándose del paso tambaleante del otrora Estado Grande, ahora lleno de sangre, sin obras y con baches en las carreteras.
Pero donde de plano sí se volaron la barda, fue en colocar como logro de toda una administración estatal la cosecha de camote,aunque varios asistentes al evento recordaron su infancia con aquella ronda de La Rueda de San Miguel, donde todos traen camote y miel, pero ¿a quién creen que querían voltear en ese momento por traer orejas de burro? Es pregunta informada.
******
LOS QUE MAÑANA festejarán, a pesar de que no tienen mucho, son los priistas del estado, y es que con motivo del 90 aniversario del dinosaurio político, la dirigencia del Comité Directivo Estatal del PRI que encabeza Omar Bazán, citó a la militancia de la familia revolucionaria a un desayuno en las instalaciones de las oficinas de la Dale, para así celebrar un año más de vida del priismo, el cual anda mal herido, pero aún dista de morir y por eso, pretenden la resurrección aunque no sea al tercer día.
La pregunta es si invitó a Tony Meléndez, quien recientemente le cantó en un desayuno militar al propio Javier Corral, o al mismísimo Alex Cano, quien junto con el artista son las cartas que anda impulsando el ex gobernador Reyes Baeza para hacerle contrapeso a Bazán Flores al interior del PRI de cara a las elecciones del 2021.


Source: Columna