CON PRÁCTICAMENTE LA región serrana y noroeste del estado ardiendo, pues la realidad ha superado lo que puedan escribir o narrar los medios de comunicación “tóxicos y mala leche”, a través de múltiples muestras en las redes sociales que van más allá de lo que digan o hagan los “detractores” del Nuevo Amanecer, el gobernador Javier Corral no ha sido para dar la cara a pesar que los enfrentamientos entre miembros del crimen organizado han ocurrido un día sí y otro también, mismos que aunque, y según los argumentos del Estado, suceden entre los malos, han cobrado ya varias víctimas colaterales, tan es así que la psicosis que viven los pobladores de esas zonas de la entidad han provocado toques de queda y ausentismo en las escuelas.
Por lo que ayer, con un gobernador que se niega a hablar de la narcoviolencia que sacude al estado que dirige, los malosos que anduvieron en Palacio de Gobierno, nos dicen que el jefe del Nuevo Amanecer también impidió que el fiscal César Peniche pudiera ofrecer información al respecto, pues sin decir agua va, cuando el titular de la Fiscalía General del Estado se disponía a hablar, Corral lo tomó del brazo y se lo llevó a su despacho, donde ojalá y se hayan puesto a laborar para contener la inseguridad que en ese momento tenía aterrorizada a la población de Gómez Farías, comunidad que ayer fue tomada por comandos armados.
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PERO SI EL gobernador Javier Corral no quiere tocar el tema de la violencia, quienes sí lo harán largo y tendido son las diputadas locales del PRI que coordina Isela Torres, y es que la legisladora ofrecerá hoy una rueda de prensa para analizar el asunto, mismo que tiene en caos a la población de la región noroeste y serrana de Chihuahua, debido a las constantes balaceras entre presuntos miembros del crimen organizado, pues aunque el fiscal César Peniche acudió hace dos semanas al Congreso del Estado para comparecer y describir la estrategia de seguridad, la situación no ha mejorado y sólo se ha agudizado en algunas regiones, principalmente las que colindan con Sinaloa y Sonora, de donde según versiones, provienen los grupos criminales que han incendiado al estado.
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Y PARA CONCLUIR, al menos en el tintero, con la historia interminable de la violencia, los malosos deslizaron que hace unos días, quien puso el grito en el cielo y exhibió la estrategia un tanto fallida del Estado en torno a la seguridad, fue ni más ni menos que el alcalde de Cuauhtémoc, Beto Pérez Holguín, el cual estuvo en una reunión con empresarios de ese municipio para analizar la problemática, y es que ahí, el edil destapó que aunque desde hace meses el Ejecutivo tomó el control de la lucha contra la inseguridad, en realidad y en la actualidad, sólo hay cuatro agentes de alto rango que auxilian en dichas labores a los policías de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, mismos que patrullaban en vehículos de la DSPM cuauhtemense ante la ausencia de apoyos provenientes de la Comisión Estatal de Seguridad, lo que por obvias razones provocó que los uniformados locales pusieran el grito en el cielo con todo y sirenas.
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CAMBIANDO A TERRENOS grillos, quien permanecerá hasta el viernes en la Ciudad de México, luego de que hoy acudirá con 28 alcaldes priistas a una reunión con secretarios federales, es el dirigente del PRI Estatal, Omar Bazán Flores, pues el chico maravilla tricolor ha sido llamado por el mandamás del CEN, Enrique Ochoa Reza, debido a que ese día y previo al inicio del fin de semana, se reunirá el Consejo Político Nacional de la familia revolucionaria, con la intención de irle dando forma a las candidaturas de los gallos que irán en busca de los puestos de elección en el 2018, año crucial en las aspiraciones de los priistas, sobre todo porque en días pasados y entre tanta reunión de militancia del partido de Plutarco, servirán de mucho para lo que tenga que reportarles Bazán a los meros jefazos del priismo nacional.
Source: Columna