Camila Sodi pidió “chance”

Entender a un personaje, des­de la objetividad, es parte del trabajo del actor, sin embar­go, cuando ese rol es de al­guien que se conoce y más aún, con quien se tiene una fuerte relación de amistad, la situación se torna complica­da al grado de pedir permiso para hacerlo, informó Excélsior.

Eso fue lo que vivió Camila Sodi, quien en Luis Miguel, la serie, interpreta al gran amor del cantante, quien resultó ser muy allegada a ella.

“Es alguien que quiero mu­cho, tenemos una amistad de hace mucho tiempo y eso tor­na mucho más complicado interpretarla, quieres decirle: ‘amiga yo te voy a hacer justi­cia’, pero por otro lado, existe algo escrito que no lo hizo ella, ni yo, y que es la memoria que tiene Luis Miguel de ella, fil­trada por la pluma de Daniel Krauze.

“Con eso se me quitó como la responsabilidad porque le daré vida a mi amiga, pero realmente no es ella, es el re­cuerdo que existe de ella, algo difícil de entender, pero que me sirvió para no sentirme presionada”, dijo.

Sin embargo, Sodi no sólo se quedó con esta reflexión, fue más allá, aunque la mujer que interpreta es su amiga, se lanzó a pedirle permiso para este proyecto.

“Soy muy prudente con la vida privada de las personas porque eso es lo que quie­ro para mí. Cuando le hablé por teléfono fue solamen­te para pedirle permiso, así como: ‘está sucediendo esto, creo que voy a ser tú, me das chance’, nos vimos para tomar un café y le pedí que no me contara nada, lo que quería era poner atención en cómo agarraba el café, la serville­ta, cómo miraba, cómo ha­blaba, era desmenuzar cómo gesticulaba, un análisis de persona, porque a mí no me competía la historia, esa esta­ba escrita por Krauze con re­cuerdos de Luis Miguel”, dijo.

Según la actriz, esta mujer misteriosa de la que no quiso revelar el nombre, pero que apunta a que es Issabela Ca­mil, fue el gran amor de El Sol y para lograr darle un parecido físico tuvo que someterse a un proceso de caracterización.

“Muy fuerte, me pintaron el cabello rubio y los ojos de otro color, al verme al espejo, sentía que por fin pertenecía a mi familia porque mi mamá es rubia de ojo azul, pero por otro lado me sentía totalmen­te ajena a mí, situación que me gustó mucho”, compartió.

En la vida real la relación sentimental que Camil y el cantante sostuvieron fue por alrededor de siete años, en los que ella siempre estuvo al margen de la vida pública de su novio, balance y prudencia que para Sodi fue lo más com­plicado de transmitir.

“Creo que las relaciones humanas son súper compli­cadas y si le suman el ingre­diente de ser muy, muy, muy famoso, es casi insostenible, todo lo que naturalmente po­drías intentar trabajar se vuel­ve público, expuesto, todo el tiempo, y enamorarte de Luis Miguel debió haber sido complicadísimo, estoy casi segura que no era celosa, se le aven­taban todas las mujeres, era el Elvis de México, y para estar con él se requería un tipo es­pecífico de mujer, que es muy segura de sí misma”, dijo.

“Tuvieron una relación en la que se veían a los ojos, no hacía falta nada más. Esta mujer no necesitaba nada de él, no era una relación des­de ese lugar, era muy limpia”, concluyó.


Source: Espectaculos