Homicidio en segundo grado es el cargo que enfrenta Angela Clark, una ciudadana de Phoenix, Arizona, que dejó sin supervisión a su hija en la bañera.
A la mujer de 29 años de edad le interesó más tener relaciones sexuales con su ex pareja y dejó la llave del agua abierta con la nena en el interior de la tina jugando.
Según relata la policía local, en los mensajes de texto de su celular, Clark le decía a su ex pareja que había intentado de todos los medio dejar a la nena dormida, sin conseguirlo, antes de la llegada del hombre.
Por ese motivo, decidió dejarla jugar en la bañera con la llave abierta y el desagüe destapado. Sin embargo, después de tener relaciones sexuales por 25 minutos, ambos fueron a la bañera y encontraron a la niña en la tina flotando boca abajo.
Inmediatamente llamaron al 911. Los paramédicos la trasladaron al Hospital para Niños de Phoenix, pero días después murió internada.
La pareja también tiene otra niña, de 15 meses y se encontraba presente en la casa al momento de los hechos.