El Coordinador del PAN, Ricardo Anaya Cortés, manifestó que no debe haber trabas para la revisión exhaustiva de los recursos públicos en los tres niveles de gobierno, porque sólo así el Sistema Nacional Anticorrupción cumplirá el propósito para el que fue creado, y los mexicanos podrán recuperar la confianza en las autoridades.
Los Diputados del PAN estarán atentos, hasta ver concluido el proceso de aprobación del Sistema Nacional Anticorrupción, porque “cuando se trata del dinero de los ciudadanos, no debe haber diques, cortinas o pretextos que impidan saber cómo son utilizados los recursos por el gobierno federal, por los gobiernos estatales o por los municipales, indicó en un comunicado de prensa.
“Desde que propusimos la iniciativa, en noviembre de 2014, los diputados del PAN tuvimos claro que la meta del Sistema era lograr la mayor revisión posible”, expresó.
Los diputados del PAN, dijo Anaya Cortés, “nos mantuvimos firmes en los puntos que consideramos esenciales para la efectividad de la reforma, tales como otorgar mayores facultades a la Auditoría Superior de la Federación (ASF); que el titular de la Función Pública sea ratificado por el Senado; y especialmente que se revise el uso del dinero proveniente de la Federación, que manejan los estados y municipios.
Señaló que las entidades federativas reciben recursos del orden de 1.5 billones de pesos, para la realización de diversos proyectos de orden estatal y municipal, lo que representa la tercera parte del presupuesto total de la Federación.
Los ramos más importantes por el monto de las participaciones son el ramo 28 y el ramo 33. Si la reforma que crea el Sistema Nacional Anticorrupción es avalada en el Senado y los congresos estatales, estos recursos podrán ser auditados, para beneficio de todos los mexicanos, añadió.
“El compromiso de todas las fuerzas políticas fue acreditado con la aprobación mayoritaria de la reforma; resta ahora completar el recorrido legal y poner en funcionamiento el Sistema”, recalcó el Coordinador panista.
Resaltó la importancia de recordar que el principal incentivo a la corrupción es la falta de control, vigilancia y fiscalización de la gestión pública.
La experiencia en México ha sido que la ausencia de estos mecanismos, ha favorecido toda clase de conductas indebidas y de saqueo de recursos, que hasta hoy han quedado impunes, subrayó.
Comento que con nuevos mecanismos de revisión, control y auditoría, se inhibirán las conductas contrarias a la ética y la legalidad por parte de los funcionarios públicos, en los tres órdenes de Gobierno.
“El Sistema Nacional Anticorrupción es un instrumento que ayudará a ir recuperando la confianza de los ciudadanos en sus instituciones, y a revertir la impunidad que tanto lastima a México”, concluyó.