A siete años de su creación, el impacto de la Iniciativa Mérida sigue estando poco claro, indica un reporte del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos que publicó la Agencia Reforma.
Publicado en el marco de la propuesta del Gobierno de Barack Obama de destinar a este programa 119 millones de dólares para el año fiscal 2016, el informe advierte que la violencia perpetrada por grupos del crimen organizado continúa amenazando la seguridad ciudadana y la gobernabilidad en algunas partes del país, como en Ciudad Juárez.
Da cuenta además de situaciones recientes de inseguridad como el derribo de un helicóptero en Jalisco en mayo de 2015, los enfrentamientos en Tamaulipas y el conflicto por los grupos de autodefensa en Michoacán.
Elaborado por los especialistas Clare Ribando y Kristin Finklea, el documento refiere que casos recientes como la desaparición de 43 estudiantes en Iguala y la masacre de Tlatlaya han llamado la atención sobre los problemas de corrupción y de impunidad que persisten en México.
“Con la poca información públicamente disponible sobre qué parámetros específicos usan los gobiernos de México y Estados Unidos para medir el impacto de la Iniciativa Mérida, analistas han debatido cómo deben ser evaluados los esfuerzos bilaterales”, indica.
“Mientras los gobiernos de México y EU han definido metas similares al largo plazo, sus prioridades en el corto plazo pueden ser diferentes. México se puede enfocar más en reducir el crimen y la violencia asociada al narcotráfico, en tanto que EU puede poner mayor énfasis en capturar agresivamente a los líderes de las organizaciones de la delincuencia organizada transnacional y en la incautación de drogas ilícitas”.
El reporte detalla que las extradiciones de México a Estados Unidos han ido a la baja, al pasar de su pico en el año 2012, con 115, a 66 en 2014.
Indica que pese al significativo número de oficiales del sector judicial que han sido entrenados, las altas tasas de rotación dentro de las instituciones del sistema de justicia criminal han limitado el impacto de los programas de entrenamiento de Estados Unidos.
Los resultados de la Iniciativa Mérida, advierte, son unos si se mide el arresto de líderes de los cárteles del narcotráfico y la incautación de armas y drogas, así como con el precio y la pureza de las drogas que llegan a EU, y otros muy distintos si se toma como referencia la percepción de los ciudadanos en México sobre el crimen y la violencia, así como de la efectividad de las autoridades.
A diferencia de lo que ocurría en los primeros años de la Iniciativa Mérida, cuando la mayoría de los recursos se destinaban a transferencia de equipo, el programa ahora se enfoca más en la construcción de instituciones y el fortalecimiento de las comunidades en el país.