Las autoridades sanitarias de Estados Unidos aprobaron este martes la venta del medicamento Addyi, considerado como “el viagra femenino” por sus efectos en el deseo sexual de las mujeres.
La Agencia Federal del Medicamento (o FDA, por sus siglas en inglés), autorizó la venta de flibanserina, como se conoce genéricamente este fármaco, siempre que se haga con receta y bajo la supervisión de un médico.
Asimismo, la etiqueta de este medicamento tendrá que advertir que, mezclado con alcohol, puede producir una bajada peligrosa de la presión arterial, así como posibles desmayos.
Estos efectos secundarios también pueden desencadenarse si el Addyi se toma mientras se consumen otros medicamentos, incluidos los que se recetan para tratar infecciones vaginales.
El viagra femenino es un fármaco no hormonal que actúa sobre los neurotransmisores del cerebro, tratando un mal que se conoce como anafrodisia o deseo sexual inhibido, es decir, una pérdida de interés en el sexo.
Estará recomendado para las mujeres con buen estado de salud que aún no hayan alcanzado la menopausia y que hayan perdido la libido.
Una de cada 10 mujeres sufre de trastorno de deseo sexual hipoactivo (TDSH), según estimaciones de la Society for Women’s Health Research.
Hasta ahora, los médicos habían tratado la pérdida del apetito sexual femenino con psicoterapia e incluso con estrógeno y testosterona, pero éste será el primer medicamento vendido con tal fin.
Sin embargo, la flibanserina tuvo que recorrer un largo camino hasta lograr la aprobación de las autoridades.
La FDA rechazó la salida al mercado del medicamento en 2010 y 2013, después de que expertos aseguraran que no existían ventajas concluyentes sobre su eficacia, así como por sus efectos secundarios, que incluyen náuseas, somnolencia y mareos.