La senadora Mónica Arriola Gordillo propuso una iniciativa para reformar el Código Penal Federal, a fin de sancionar el delito de abuso por divulgación –con una pena de dos a cinco meses de prisión y hasta cien días de multa– que se comete cuando una persona fotografía o graba la imagen de otra, parcial o totalmente desnuda, y la distribuye en cualquier medio sin su consentimiento, de forma impresa o en las redes sociales.
Comentó que el proyecto modificaría la denominación del Capítulo I del Título Decimoquinto del Código, para quedar como Delitos contra la Libertad y el Normal Desarrollo Psicosexual.
También se considera que comete este delito quien, sin haber capturado la imagen, la distribuya a cualquier medio. Asimismo, el medio virtual o impreso de divulgación que publique dichas imágenes, deberá removerlas de forma inmediata a petición de la víctima; y de no hacerlo se le impondrán trescientos días de multa.
Arriola Gordillo dijo que en esta iniciativa no tiene una víctima específica, sino que lesiona a ambos géneros; aunque las mujeres han sido señaladas como las más afectadas. Ignorar este fenómeno implicaría la indiferencia ante un delito que contiene características de violencia sexual y dolo, advirtió.
Señaló que es importante sancionar esta conducta porque conlleva graves consecuencias psicológicas y emocionales para las víctimas. Debemos entender que el atropello a la privacidad va en incremento a nivel mundial, y países que han decidido estar a la vanguardia legislativa, han empezado a diseñar un marco jurídico que castigue este fenómeno, principalmente desde la materia penal, sostuvo.
Puntualizó que este delito toma gran relevancia si se toma en cuenta que en las redes sociales, donde se ha generado esta conducta de manera predominante, hay millones de publicaciones diarias. Por ejemplo, en Twitter hay más de 250 millones de tuits al día y en Facebook 800 millones de actualizaciones.
Las víctimas de esta práctica, al igual que las que sufren violencia doméstica o asalto sexual, tienen consecuencias negativas en su psicología, y les provoca un miedo profundo. La anorexia nerviosa y la depresión son enfermedades comunes para personas que son acosadas online. Incluso, algunos investigadores han encontrado que la ansiedad de víctimas de acoso cibernético crece con mayor severidad con el paso del tiempo.
Los avances legislativos, por ejemplo, que se han logrado en California, Estados Unidos, han sido criticados por la carencia de elementos punibles en diversos aspectos, limitando su alcance de protección, detalló. En dicha legislación, explicó, únicamente se castiga al que captura la imagen, pero no a terceros que pudieran distribuirla, lo cual se corrigió en esta propuesta.
La iniciativa propuesta por la senadora Mónica Arriola fue turnada a las comisiones unidas de Justicia y de Estudios Legislativos.