Crea Nueva York ley para evitar delitos sexuales en campus universitarios

El gobernador del estado de Nueva York, Michael Cuomo, ratificó esta semana una nueva ley que obliga a todas las universidades del estado a adoptar la política de “yes means yes”, “sí significa sí”, en relación con las actividades sexuales entre estudiantes a fin de disminuir los índices de abusos sexuales y violaciones dentro de los campus universitarios.

“¿Por qué el abuso sexual en los campus universitarios es un problema? Porque lo hemos dejado pasar por mucho tiempo”, declaró el gobernador Cuomo en la Universidad de Nueva York en el evento de ratificación de esta ley.

“Yes means yes” es un movimiento que pretende alcanzar a cada estado en los Estados Unidos para que dentro de los campus universitarios las relaciones sexuales deban ser consentidas expresamente de forma tal que la falta de oposición no se considere una aceptación.

En septiembre de 2014 el gobernador de California, Jerry Brown, firmó la primera ley en los Estados Unidos, a nivel estatal y federal, que dispone que antes de una relación sexual debe existir consentimiento, definiendo este como “un acuerdo afirmativo, consiente y voluntario para involucrarse en actividades sexuales”, redefiniendo de esta forma la conceptualización de la violación.

Así, la ley dispone que el silencio o la falta de resistencia u oposición no significa consentimiento y especifica que una persona bajo los efectos del alcohol, drogas, que esté inconsciente o dormida no puede considerarse que otorgó su consentimiento.

Se trata de leyes que han encontrado cierta oposición por ampliar la definición de abuso sexual. Entre estos detractores está la Coalición Nacional de Hombres que considera que la Ley fomenta el odio hacia los hombres, pues “concede licencia para acusaciones falsas, niega al acusado el debido proceso, costará al estado cientos de millones de dólares por demandas y dispone el escenario para que se arruinen vidas de inocentes”.

La ley en Nueva York, en contraste con la de California, dispone mayor presupuesto para la policía estatal a ser usado en la investigación de delitos sexuales en los campus universitarios, además de recursos para las víctimas como líneas telefónicas de ayuda y asistencia. Además, proporciona amnistía a los estudiantes que reporten casos de violencia sexual.

Con este tipo de leyes, las mujeres evitan ser víctimas, al menos dentro de los campus universitarios, de abusos sexuales en los que se les proporcionan drogas o alcohol para evitar su resistencia y en las que los violadores se defienden diciendo que no hubo oposición. Así le sucedió a una mujer en 2012 a quien el cantante Cee-Lo Green le proporcionó éxtasis mientras cenaban. La mujer relató que no recordaba esa cita y que al día siguiente había amanecido desnuda en la cama del cantante de 40 años.

Originalmente se presentaron cargos por agresión sexual, sin embargo frente a la falta de pruebas de que hubiere habido una violación las acusaciones cambiaron a haber suministrado la droga a la mujer que por motivos legales no fue identificada. Así, no se pudo probar que no hubo consentimiento durante la relación sexual que la pareja sostuvo esa noche y por tal motivo el cantante solo fue sentenciado a tres años de libertad probatoria y a prestar 360 horas de trabajo comunitario por haberle proporcionado drogas.

Cee-Lo Green escribió en su cuenta de Twitter un mensaje en el que apoyaba la idea que si la mujer estaba inconsciente, no había habido violación. Horas después se retractó de sus palabras.

Fuente: Reuters.com