Autoridades en San Antonio, Texas, buscan pistas que puedan dar con los responsables del robo del cuerpo de una de una mujer de 25 años de edad, sustraído de una funeraria en el noroeste de la ciudad la semana pasada, informó Excélsior.
Javier Salazar, sargento de la policía de San Antonio, informó que el robo fue reportado el 16 de agosto después de que los empleados de la funeraria Mission Park encontraron vacío el ataúd que contenía los restos de Julie Mott.
La joven murió el pasado 8 de agosto de fibrosis quística, de acuerdo con Robert Tips, propietario de la funeraria
Tips, amigo personal de la familia de Mott, dijo que los servicios funerarios se llevaron a cabo el 15 de agosto, fecha en que habría cumplido sus 26 años.
El servicio funerario concluyó al mediodía, cuando el ataúd fue colocado en un cuarto privado para ser visitado por la familia en la parte trasera de la funeraria. El inmueble cerró alrededor de las 16:30 horas.
Al día siguiente, sin embargo, los trabajadores encontraron el ataúd vacío. Tips informó que la funeraria ofrece 20 mil dólares por información que conduzca a los responsables del robo del cadáver.
La policía sospecha que en algún momento durante las tres horas entre el término del servicio y el cierre de la funeraria, alguien sacó el cuerpo de Mott del ataúd.
Nuestra unidad de inteligencia ha estado investigando literalmente sin parar”, dijo el sargento Salazar. “Esperamos que el público que escuche acerca de este caso pueda ser capaz de arrojar algo de luz sobre lo ocurrido”, agregó.
La policía señaló que no cree que el cuerpo haya sido sustraído durante la noche, porque una alarma en la funeraria no se activó y no parecía haber ninguna entrada forzada.