El pasado 8 de noviembre, los habitantes de la ciudad japonesa de Fukuoka fueron testigos de un hecho insólito: un enorme agujero de más de 30 metros de diámetro y 15 metros de profundidad se originó en una vía de circulación vehicular de cinco carriles.
Las autoridades japonesas iniciaron inmediatamente la labor para evacuar a los habitantes de esta zona residencial y rehabilitar la calle. El trabajo se vio afectado por el agua que llenó rápidamente el agujero, ocasionando cortes masivos de servicios básicos y aumentando el riesgo de colapso de los edificios a su alrededor. A pesar de ello, nadie sufrió lesiones a causa del incidente.
El origen de la falla fue la construcción de un túnel subterráneo en la zona. La filtración de agua produjo un deslizamiento de tierra que posteriormente hizo hundir el asfalto y generó el enorme agujero.
Los trabajadores utilizaron cerca de 6.200 metros cúbicos de arena y cemento para tapar el agujero y rehabilitar la circulación tan solo una semana después de ocurrido el incidente. Las autoridades afirman incluso que el trabajo duró tan solo 48 horas y que el tiempo restante fue utilizado para realizar estudios con el fin de descartar que el problema vuelva a producirse. Un verdadero ejemplo a seguir por muchos países.
RT Noticias