El cáncer de ovario, incluso en su etapa temprana, presenta señales que nos ayudan a una detección temprana.
Y, aunque aparecen con mayor frecuencia si se ha propagado más allá de los ovarios, tienden a ser persistentes; alrededor de 12 veces al mes.
Los síntomas más comunes son:
1. Inflamación.
2. Dolor en la pelvis o en el abdomen.
3. Dificultad para ingerir alimentos o sensación rápida de llenura al comer.
4. Síntomas urinarios, tales como urgencia (sensación constante de tener que orinar) o frecuencia (tener que orinar a menudo).
5. Cansancio.
6. Problemas estomacales.
7. Dolor de espalda.
8. Dolor durante las relaciones sexuales.