Según un informe del Pew Research Center, cada vez más gente en EU. nunca se casó ni se casará, aunque no se sepa claramente por qué.
Metas profesionales, la situación financiera y el estilo de vida en general influyen en la imagen que los estadounidenses se hacen del matrimonio, como también mensajes de amigos, familiares y medios.
Sin embargo, no todo lo que se dice y opina en la sociedad representa de forma precisa la antigua y consagrada tradición. A continuación, diez cosas que se suelen decir sobre el matrimonio y pueden resultar engañosas fuera de contexto.
Hay que encontrar a la pareja perfecta
¿Realmente es necesario buscar a la persona perfecta con la que estar? Según Gal Szekely, del Huffington Post, esto no hace falta para tener un matrimonio feliz, e incluso puede provocar ansiedad entre los miembros de la pareja si esperan que su otra mitad esté a la altura de un estándar imposible.
“Por supuesto, nadie es perfecto, y cuando comparamos a nuestra pareja a ese ideal, inevitablemente nos decepciona”, escribió Szekely. “Entonces, cometemos el error de creer que esa persona es la pareja equivocada y en consecuencia tiramos a la basura una relación demasiado pronto”.
Discutir destruye matrimonios
Hay quienes creen que discutir y tener conflictos puede significar el fin de la relación. Pero como afirmó la Dra. Gail Saltz en The Today Show, tener algunos altercados verbales puede fortalecer a la pareja.
Negarse a solucionar un desacuerdo puede provocar problemas, sostuvo Saltz, pero discutir y llegar a una conclusión o un compromiso sólo puede crear más armonía e intimidad en una pareja casada, a pesar de las diferencias.
“Cómo se negocien esas diferencias predice qué tan sana será la relación”, escribió Saltz. “Discutir bien puede generar más intimidad porque demuestra a ambos que pueden no estar de acuerdo pero encontrar una forma de comprometerse y amarse igual”.
Hay que contarse todo
Compartir detalles íntimos sobre lo que usted piensa, siente y vive puede resultar positivo para muchas parejas casadas. Pero contarle cada detalle a su cónyuge no siempre es útil.
Hay distintas formas en las que Facebook puede destruir un matrimonio. Una de ellas es concentrarse demasiado en las vidas y opiniones de los demás en Facebook en vez de las propias.
“Hay quienes llamarían a esto “el efecto Instagram”, pero es una idea sencilla: a uno le importa más lo que publican amigos y familiares en Facebook que lo que esté haciendo su pareja frente a sus narices”, según National.
Tenga cuidado con sus suegros
Si uno lo piensa en serio, la familia política no es tan aterradora.
De hecho, para cuando usted se case, ya debería haber conocido a los suegros y cómo se manejan, ya sea en el momento en el que les contó que se iba a casar o en otra situación. Hay formas de aplacar a los suegros para conocerlos un poco mejor, como llevarlos a cenar o hacerlos participar en diversas actividades que usted haga con su pareja, lo que podría calmar cualquier tormenta que surja.
Hay que trabajar duro en un matrimonio
Suele escucharse que los cónyuges tienen que trabajar en el matrimonio para seguir adelante, pero ¿no será, más que trabajo, prestarle atención? De acuerdo a Psychology Today, la forma en la que uno administre y mantenga un matrimonio puede ayudar más que esforzarse simplemente para que funcione. Para cuando la pareja esté lista para casarse, la cosa debería tratarse más de hacer que todo siga avanzando y creciendo en vez de que sólo funcione.
Estar casado es muy diferente a salir
Sí, son dos cosas diferentes, porque uno ya no está tratando de impresionar a su otra mitad y sí de seguir con la persona. Pero hay formas de hacer que estar casado sea parecido a salir, y hacerlo puede impulsar la relación.
She Knows, un sitio web con información sobre matrimonio y relaciones, analizó las diversas formas de hacer que ambas cosas se parezcan mucho, tales como tener citas, hacer actividades con la pareja y aprender cosas del otro.
La administración del dinero puede terminar un matrimonio
¿Uno de los cónyuges tiene más alfabetización financiera que el otro? ¿O los dos no están seguros de cómo gestionar el dinero?
Pues bien, discutir las finanzas podría ayudar al matrimonio.
Según Bankrate, un sitio con recursos sobre información financiera, cuando una pareja casada decide charlar sobre sus problemas financieros y tratar de solucionarlos, a ambos cónyuges les sirve aprender un poco más sobre sí mismos y sus parejas. Además, esto ayuda a las parejas a evitar peleas que podrían resultar devastadoras.
“Es algo con una carga emotiva muy grande, que representa el poder, la seguridad, el control, la autoestima”, declaró a Bankrate Olivia Mellan, autora de libros sobre información financiera. “Uno no se pelea sólo por el dinero, sino también por lo que significa”.
Abriéndose un poco y siendo un poco más honesta sobre las finanzas, la pareja puede superar los problemas y encontrar posibles soluciones positivas.
Una buena esposa crea un buen hogar
Sí, es así.
Pero eso no es todo.
En agosto, The Wall Street Journal publicó que los hombres que realizan quehaceres domésticos pueden inspirar a sus hijas a fijarse metas profesionales ambiciosas. Cuando los padres lavan los platos o la ropa, las hijas se inspiran y buscan carreras que pueden estar dominadas por hombres, ya que ven la igualdad de género con sus propios ojos.
“Al ayudar en casa, los padres pueden darles a entender a sus hijas que ellas pueden esperar que los hombres ayuden en la casa y liberen más tiempo para que las mujeres trabajen”, informó The Wall Street Journal.
Demasiadas diferencias pueden destruir un matrimonio
¿Alguna vez se preocupó por ser demasiado diferente de su pareja?
Bueno, recuerde que los opuestos se atraen.
Y le digo más: existen muchas parejas casadas que siguen juntas pese a tener fuertes diferencias en materia de fe o religión, por ejemplo. Según WebMD, las diferencias políticas pueden fortalecer un matrimonio, en particular porque permiten que ambos cónyuges vean el otro lado de una discusión o un debate. En el caso de la fe, muchas parejas de credos diferentes tienden a tener éxito aunque sus creencias religiosas no coincidan.
Casarse lo transformará por completo
A algunas personas les preocupa que el matrimonio las cambie. Pero según Woman’s Day, una página web sobre salud y bienestar, no necesariamente es así. Las parejas deberían entender que la persona con la que se van a casar tendrá ciertas características que no les gustarán, pero probablemente el sentimiento sea recíproco, de acuerdo con Gilda Carle, una experta en matrimonios que habló con Woman’s Day. Lo que vuelve única a una persona es también lo que la hace especial, y eso cambia y se puede mejorar lentamente.
“Con el tiempo, cada uno puede trabajar para adaptarse a los hábitos del otro y hablar sobre las cosas que realmente se pueden cambiar o dejar atrás”, sostuvo Carle.