Nutrigenética: vivir hasta los 150 años sería un hito posible

Cuando se piensa en la extensión de la longevidad, la imaginación tiende a creer que los seres humanos arbitrarán los medios y tecnología necesarios para aspirar a la eternidad. Este deseo ya no es un guion de una película de ciencia ficción. Un nuevo estudio publicado recientemente en la revista Nature Communications señaló que el aumento de la esperanza de vida hasta los 150 años, o más, sería un hito posible.

Se trata de una investigación que combina datos de análisis de sangre e información sobre el ejercicio físico para identificar una nueva medida de “edad biológica”Los resultados sugieren que hay un aspecto de la longevidad humana que puede ser crucial si se quiere alcanzar el máximo potencial, y no tiene que ver con la enfermedad o con la elección de un estilo de vida.

Hoy en día, sabemos que la identificación de ciertas variantes en el genoma permite predecir si una persona presentará mayor o menor esperanza de vida que la media de la población.Hay un aspecto de la longevidad humana que puede ser crucial si se quiere alcanzar el máximo potencial (Getty Images)Hay un aspecto de la longevidad humana que puede ser crucial si se quiere alcanzar el máximo potencial (Getty Images)

A pesar de que nuestra genética puede prepararnos para una vida larga, luego es necesario tener buenos hábitos alimentarios, realizar actividad física, manejar los niveles de ansiedad y estrés para lentificar el envejecimiento celular. A este objetivo aspira la nutrigenética.

Según coinciden los expertos, el envejecimiento celular ocurre antes de que se manifieste una enfermedad y esto “pone de relevancia la importancia de encontrar biomarcadores que nos indiquen si hay personas que envejecen molecularmente más rápido de lo normal, ya que esto indicaría que tienen un riesgo más alto de padecer enfermedades de manera prematura”.

Cada alimento impacta sobre un gen y este, a su vez, reacciona frente a ese alimento. Así es como funciona el metabolismo, pero cada persona tiene una reacción metabólica distinta.

En diálogo con Infobae, el prestigioso neurólogo Alejandro Andersson, director médico del Instituto de Neurología Buenos Aires explicó: “La nutrigenética es la rama de la genética que estudia la relación entre los genes y la respuesta individual a la dieta, analiza la forma en la que el organismo responde a la dieta en función del perfil genético individual, del genoma o conjunto de todos nuestros genes y tiene mucho que ver con la longevidad”.La nutrigenética es la rama de la genética que estudia la relación entre los genes y la respuesta individual a la dieta (Getty Images)La nutrigenética es la rama de la genética que estudia la relación entre los genes y la respuesta individual a la dieta (Getty Images)

La longevidad de un individuo depende en un tercio de nuestra genética y en dos tercios de los hábitos que seguimos. El genotipo es el punto de partida, es importante que sea bueno, pero también es fundamental no fumar, hacer ejercicio, dormir bien, no ser obeso, controlar el estrés, y de esa manera posiblemente esas personas podrían llegar a vivir más”, precisó Anderson.

En diálogo con Infobae, la doctora Fabiana Massenzana, médica especialista en Nutrigenética y Nutrigenómica Avanzada, (MN 151417), explicó: “Uno de estos procesos moleculares es el acortamiento progresivo de unas estructuras que protegen a nuestros cromosomas, llamados telómeros. Esta erosión de los telómeros está determinada genéticamente, pero se puede acelerar por malos hábitos de vida. Cuando los telómeros llegan a una longitud crítica, esto es detectado por las células como un daño irreparable cuya consecuencia es la muerte o senescencia celular, así como que las células madre dejen de regenerar los tejidos. Esta incapacidad de reparar los tejidos a su vez lleva a la disfunción de órganos y a la aparición de la enfermedad”.

Según especificó la especialista, la forma más importante y conocida de revertir estos daños celulares es la alimentación. En un estudio se ha visto que la longitud telomérica podía predecir el Índice de Masa Corporal (IMC) y el perímetro de cintura de los pacientes, e incluso la respuesta a los cambios de la dieta.Uno de los procesos moleculares del envejecimiento es el acortamiento progresivo de unas estructuras que protegen a nuestros cromosomas, los telómeros (Getty Images)Uno de los procesos moleculares del envejecimiento es el acortamiento progresivo de unas estructuras que protegen a nuestros cromosomas, los telómeros (Getty Images)

“Los telómeros más largos en general correspondían a menores IMC, menor Peso corporal, mejor respuesta a los cambios en la dieta y menor riesgo de permanecer obeso en 5 años, -según la doctora Massenzana-, la dieta que mayores cambios produjo es la mediterránea, señala que “se observa que luego de realizar la dieta, los telómeros se alargaban. Aunque este efecto de alargamiento telomérico por la dieta mediterránea sólo ocurre en aquellos pacientes que poseen un polimorfismo específico”.

Otros factores dietarios que se asocian a longitud telomérica son:

-Alto consumo de fibra

-Alto consumo de vitaminas

-Alto contenido plasmático de luteína, zeaxantina (ambos son carotenoides) y vitamina

Hay muchas publicaciones que profundizan conceptos en relación a la nutrigenética. Se ha documentado por ejemplo en una comunidad amish de Pensilvania, Estados Unidos, en donde no había ni existía el sobrepeso, a pesar de que muchos de los habitantes eran portadores del gen que condicionaba el sobrepeso. “Los científicos demostraron que este gen quedaba desactivado por el constante ejercicio físico que desarrollaban esos individuos ya que tenían prohibido por sus costumbres y por su religión valerse de la tecnología en el día a día”, precisó el neurólogo y advirtió: “El destino no está escrito en los genes”.Hay muchas publicaciones que profundizan conceptos en relación a la nutrigenética (Europa Press)Hay muchas publicaciones que profundizan conceptos en relación a la nutrigenética (Europa Press)

De todos los hábitos determinantes en la longevidad del ser humano, posiblemente el más estudiado sea la nutrición, que incide mucho en la aparición de enfermedades. Incluso se dice que habría que comer cómo dicte nuestro genotipo, por lo cual hay que conocerlo primero. La nutrigenética o nutrición y/o medicina personalizada parece ser el futuro”.

¿Cómo funciona? A partir de diferentes análisis uno puede saber si un paciente presenta una predisposición a tener resistencia a la insulina, por ejemplo, -determinó Andersson- entonces se controlará que tenga una buena dieta baja en azúcares y harinas refinadas, o si tiene predisposición a desarrollar enfermedades cardiovasculares le daremos una dieta con mucho Omega-3, o si se trata de un paciente que tiene genes ahorradores, le indicaremos la necesidad de tener un gran despliegue de actividad física para favorecer el gasto calórico.

Muchos estudios indican que la dieta mediterránea es la más saludable que existe”, apuntó.Muchos estudios indican que la dieta mediterránea es la más saludable que existe (EFE/Kai Försterling/Archivo)Muchos estudios indican que la dieta mediterránea es la más saludable que existe (EFE/Kai Försterling/Archivo)

Consultada por Infobae, la doctora Massenzana, amplió: El envejecimiento es el declive funcional que ocurre en los organismos de manera dependiente del tiempo. Si bien el mecanismo es complejo, la acumulación del daño producido es muy importante porque incrementa la vulnerabilidad a la patología”.

“En este sentido, la edad cronológica es la expresada por la cantidad de tiempo ocurrido en días, semanas o años. Mientras que la edad biológica se expresa como medida de parámetros relevantes a nivel biológico como, vulnerabilidad a morir o a tener una enfermedad, como riesgo de declive funcional o índice de fragilidad”, advirtió.

Infobae


Source: Crealo