Un error de dedo, literalmente, les permitió a Jazmín de los Ángeles Elizondo y Laura Isabel Florez-Estrada Pimentel, contraer matrimonio en San José, la capital de Costa Rica, donde el matrimonio y las uniones civiles del mismo sexo están prohibidos, informó EL País.
Cuando nació, Jazmín fue registrada como “hombre” en su acta de nacimiento y nunca lo modificó porque para vivir en sociedad, se supone que se debe tratar igual a hombres y a mujeres, dijo la chica, de 24 años. Sin embargo, llegó el momento en que ese desliz tendría importancia; en su boda.
El pasado 25 de julio, Jazmín se unió en matrimonio con Laura en una ceremonia precedida por el abogado Marco Castillo, uno de los principales activistas por el reconocimiento de las uniones civiles entre parejas del mismo sexo de la República, y quien declaró:
“Es un paso político importante porque se ve que los derechos no deben estar condicionados por la identidad de género. Esto tiene que provocar que la gente vea estas cuestiones como algo natural”.
No obstante, el Registro Civil de Costa Rica anunció una hora después de la noticia que intentará anular dicha unión, pese a que se llevó a cabo de manera completamente legal.