Ryan Jessen, de 33 años, acudió al hospital víctima de una fuerte migraña, sin embargo, los médicos lo detuvieron debido a que padecía una hemorragia cerebral. Su estado era tan grave que entró en coma.
Al no contar con esperanzas de vida, su familia decidió desconectarlo, no sin que antes despedirse de él y permitirle a su mascota verlo por última vez. Al respecto, Michelle, su hermana, escribió:
“El hospital hizo lo más dulce por nosotros y nos permitió traer a la perra de mi hermano para decirle adiós y con eso ella supiera por qué su dueño nunca llegó a casa. Si conocías a mi hermano, sabes que realmente amaba a su dulce perrita”.
Con más de 11 millones de reproducciones, el clip muestra al can olfateando a Ryan mientras sus padres le dicen: “Dile: Adiós, Ryan”. Posteriormente, la familia reveló que el corazón del joven fue donado a un adolescente de 17 años.