Un policía hirió accidentalmente a una niña de cuatro años cuando en realidad el destino de la bala era el perro de la familia.
The Columbus Dispatch señaló que el oficial Jonathan Thomas estaba investigando un caso cuando una mujer se acercó diciendo que su hermana, Andrea Ellis, necesitaba atención médica debido a una herida. El policía fue a la casa de la familia.
Al llegar, se le lanzó uno de los perros, así que sacó la pistola y disparó. Sin embargo, la víctima del balazo fue una niña de cuatro años, hija de Ellis, quien fue herida en la pierna.
Por su parte, Gary Parsley, con quien hablaba Thomas antes del incidente, declaró a medios locales que dispararle al perro no era la única opción del policía.
“No sé por qué sacaría el arma para dispararle”, señaló.
La niña se encuentra en recuperación y hasta el momento no se sabe qué procederá con el oficial.
Agencias