En entrevista, el vocero oficial de Tupperware Brands México manifestó que en estas fiestas es típico que las familias se reúnan al día siguiente para volver a comer lo que sobró de la cena de Navidad o Año Nuevo, informó Excélsior.
Ante estas situaciones, muchas personas coinciden en que el recalentado tiene mejor sabor, y eso, de acuerdo con el chef, se debe a una cuestión química de los alimentos.
“Sucede que todos los ingredientes reposan, no importa cuáles sean, pero debido a que el tipo de platillos que se utilizan en Navidad o Año Nuevo se hacen en horno o en ollas especiales, guardan más los sabores”, apuntó.
El especialista en cocina manifestó que, en caso de hacer pavo o pierna, ambos platillos reposan en vino, especias y demás ingredientes, los cuales hacen una costra interna y eso ayuda a que el sabor sea más rico.
“No te cambia tanto el sabor, sino que se acentúa, si haces pierna al vino tinto se concentra y queda el sabor de uva fermentada, por lo que el sabor es más concentrado”, detalló.
Al preguntarle de qué otra forma se pueden preparar los platillos típicos para el recalentado, el chef sugirió que no hay reglas, por lo que cada guiso se puede convertir en lo que sea.
“En el caso de los romeros, yo los licúo y se los pongo encima de una rebanada de pavo como tipo salsa, para que sea algo diferente. Con el bacalao, como tiene un sabor fuerte, lo pongo encima del arroz y lo cubro con salsa de ajonjolí, y con el pavo los deshebro y hago tacos dorados”, describió.
Respecto a cómo conservar los alimentos después de varios días de recalentado, Kassis resaltó que es importante utilizar recipientes especiales para guardarlos, debido a que es muy fácil que se echen a perder por todos los ingredientes que llevan.
“La opción son recipientes de plástico que tienen válvula, pues permiten que se oxigenen los ingredientes y de esta forma no permite la entrada de ninguna bacteria. Además, se deben mantener en el refrigerador, ya que el frio los mantiene frescos”, sostuvo.
El chef mexicano sugirió que los platillos se mantengan en frío una semana a lo mucho, para que conserve los sabores, ya que, entre más tiempo, más cambian.
“Como una persona de cocina, yo opino que todo está permitido, las reglas en la cocina no existen, todo te lo puedes comer como quieras, es divertido jugar con los sabores”, concluyó.