Un joven que se encontraba en un Mini Cooper se ha llevado el susto de su vida luego de que el conductor de un Volkswagen perdiera el control.
Afortunadamente el joven alcanzó a saltar y ‘se salvó por un pelo’ de haber sido estampado contra la pared.
Aunque se ve que cojea, todo parece indicar que el golpe no resultó ser tan fuerte cómo pudo ser.
Fuente: RT