Las cámaras de seguridad de Lockyer Valley, Australia, han captado el momento en que dos conductores fueron bañados con excrementos humanos luego de que el conductor de un camión, que transportaba 3 toneladas de heces, frenara para evitar una colisión con una camioneta.
Aunque nadie resultó herido, los trabajadores de reciclaje orgánico tuvieron que pasar limpiando el desorden durante varias horas.
Se informa que la carga de biosólidos estaba destinada a ser usada en una granja local como fertilizante.
Fuente: RT