Por primera vez desde que se fracturó la muñeca izquierda el 16 de noviembre, el mariscal de campo de los Pittsburgh Steelers, Aaron Rodgers, participó plenamente en el entrenamiento.
Tras perderse su segunda práctica consecutiva el miércoles, el mariscal de campo de 41 años estuvo en el campo para un frío entrenamiento de Acción de Gracias, realizando su trabajo habitual con la muñeca en un estabilizador negro mientras caían ráfagas de nieve en las instalaciones de los Steelers.
«Voy a ver cómo me siento después del jueves», comentó Aaron Rodgers el miércoles sobre los planes de entrenamiento para esta semana. «Voy a ir el jueves a que me enyesenen y luego veré cómo reacciono».
Source: Deportes
