Las Águilas del América fueron los vencedores de uno de los clásicos más polémicos y cardíacos de los últimos torneos, al imponerse 2-1 a unas Chivas del Guadalajara que, por largos periodos, parecían mejor plantadas en la cancha de su casa, el Estadio Omnilife.
Durante el primer tiempo el mayor número de llegadas fue del chiverío, sin embargo, el encuentro no se vio exento del “clásico” error del silbante Fernando Guerrero, quien anuló injustamente un gol tapatío por un fuera de lugar que nunca existió.
Luego del medio tiempo, las Águilas regresaron con un nuevo impulso, el cual se vio capitalizado en dos goles, el primero de Carlos Darwin Quintero y otro más de Oribe Peralta, quienes adelantaron a la escuadra capitalina.
La estocada parecía definitiva cuando el árbitro expulsó a Cisneros por una fuerte falta contra Paul Aguilar, quien no sólo salió tundido por el jugador rallado, sino por el público que no escatimó en vasos para agredirlo desde la tribuna.
No obstante, el equipo tapatío no se dejó caer y, luego de que el americanista Paolo Goltz también se fuera a los vestidores por una roja, el “Gulit” Peña achicó la diferencia. Las cosas se pusieron aún más intensas cuando a los de Guadalajara se le anuló un segundo gol, esta vez con todas las de la ley.
El árbitro agregó siete minutos en compensación por las expulsiones, las broncas y los cambios. Fueron siete minutos de intensas llegadas de las Chivas, sin emabrgo no se logró capitular ninguna y la última gran jugada la tuvo Michael Arroyo quien pudo haber matado al rebaño, sin embargo falló frente al portero.