En momentos en que la reputación y credibilidad de la FIFA no puede ser peor, uno de los asesores de Joseph Blatter sugirió al presidente de la organización rectora del futbol mundial que revelara uno de sus secretos más celosamente guardados.
Mark Pieth le aconsejó que dijera cuánto le paga la FIFA. El experto suizo en la lucha contra la corrupción, reclutado por la FIFA por su experiencia en gobiernos corporativos, dijo que revelar el salario de Blatter demostrará que la desacreditada organización está comprometida al cambio y la transparencia.
Pieth dijo que Blatter le explicó que hacer esa revelación amenazaba poner en una situación embarazosa y disgustar a sus aliados en la junta de la FIFA cuya paga también es secreta. “Me dijo: ‘Bien, ya sabes que no puedo”’, indicó el profesor en la Universidad de Basilea. “No les caería bien a mis amigos”.
¿Un millón de dólares? ¿Cinco millones? ¿Más? Dos años después que Blatter rechazó el consejo de Pieth, solo conocen su remuneración quizás no más de cuatro personas en la sede de la FIFA.
Sin embargo sería conveniente levantar el secreto. Uno de los motivos sería dar el ejemplo. Fundada en 1904 con el propósito de organizar el futbol a nivel internacional, la FIFA se ha convertido en una operación global multimillonaria en gran medida gracias a los éxitos financieros de las copas mundiales durante el mandato de Blatter desde 1998.
Información tomada de Publimetro