Tom Brady expresó un ‘¡qué mala onda!’ porque Nueva Inglaterra se enfrentará a los Vaqueros de Dallas cuando éstos no podrán contar con Tony Romo ni con Dez Bryant.
Aunque el mariscal estrella de los Patriotas no dijo que fuera una decepción. Esa es una gran diferencia, informó la Agencia AP.
“Este equipo muy fácilmente podría estar 4-0”, dijo Brady sobre los Vaqueros (2-2), quienes han perdido dos partidos sin Romo y sin Bryant ahora que están por recibir a Nueva Inglaterra por primera vez en su estadio de 1.2 billones de dólares esta tarde. “Ellos jugarán en casa. Tienen muchos jugadores que son muy buenos. El año pasado eran uno de los mejores equipos”.
Brady, de 38 años, está teniendo uno de sus mejores arranques en su temporada 16, el único mariscal, aparte de Peyton Manning, que ha acumulado por lo menos mil 110 yardas por aire y nueve touchdowns sin una sola intercepción en sus primeros tres partidos.
Tras haber tenido una semana de descanso, intenta unirse a Manning y a Fran Tarkenton como los únicos mariscales de campo con un comienzo de temporada de 4-0 en por lo menos cuatro ocasiones en sus carreras.
Los Vaqueros sólo intentan encontrar la manera de ganar sin Romo, quien se perderá por lo menos otros cuatro partidos luego que sufriera una fractura en su clavícula izquierda. Brandon Weeden fungirá como titular por tercera ocasión reemplazando a Romo, y tiene una racha personal de 10 partidos perdidos que se remonta a cuando formaba parte del equipo de Cleveland.
Dallas estuvo al frente ante Atlanta por dos touchdowns en tres ocasiones antes de diluirse en la segunda mitad durante la primera titularidad de Weeden tras la lesión de Romo. Luego Drew Brees venció a los Vaqueros con una anotación de 80 yardas en la segunda jugada del tiempo extra para Nueva Orleans.
Ahora a Dallas le toca ir contra el campeón defensor del Super Bowl y su racha de seis triunfos incluyendo juegos de playoffs de la temporada pasada.
Halcones Marinos-Bengalíes
Los Bengalíes de Cincinnati han pasado bastante desapercibidos esta temporada, tomando en cuenta que son uno de los seis equipos que quedan con marca perfecta en la NFL tras ganar sus primeros cuatro partidos.
Sólo se necesitaba la visita del campeón de la NFC, los Halcones Marinos de Seattle, para atraer los reflectores hacia Andy Dalton y una ofensiva que no se amilana sin importar el tamaño del desafío.
Para los Halcones Marinos, el reto es igualmente importante si buscan ratificar su buen momento y sacudirse el mal sabor de boca de un polémico triunfo de la semana anterior.
Los Halcones Marinos corrieron con suerte en su triunfo del lunes ante Detroit. Hoy en Cincinnati necesitarán mucho más que eso.
Los actuales campeones de la Conferencia Nacional han estado lejos del dominio mostrado las últimas temporadas, en las que han ido a dos Super Bowls y obtenido un título. Pese a ello, gozan de una racha de dos victorias para colocarse nuevamente en .500 y renovar sus aspiraciones. En contraparte, los Bengalíes gozan de una marca de 4-0, pero no del respeto de muchos, por lo que hoy en casa enfrentarán su prueba más complicada hasta ahora, una que podría significar algo más que un triunfo.
El mariscal de los Bengalíes, Andy Dalton, ha llamado la atención en el inicio de la campaña con sus nueve pases de touchdown a cambio de una sola intercepción. Ayudado con un ataque terrestre que es séptimo en la Liga, la ofensiva de Cincinnati promete ser una tarea complicada para Kam Chancellor, Earl Thomas y el resto de la defensa apodada “The Legion of Boom”.
Un triunfo hoy validaría la resurrección de los Halcones Marinos que empezaron la campaña con dos derrotas y lograron equiparar su registro en 2-2 con triunfos ante dos conjuntos que, hasta ese momento, no conocían la victoria, Chicago y Detroit.
San Luis (2-2) en Green Bay (4-0)
Repentinamente los Carneros cuentan con armas ofensivas para complementar su fuerte defensiva y presión al mariscal. Tavon Austin, receptor abierto, se convirtió en el primer jugador en la historia de la NFL en tener retornos para anotación de 75 yardas o más en tres temporadas consecutivas y contribuye en el juego aéreo. Todd Gurley, de las primeras selecciones en el Draft, acarreó 106 yardas en el último cuarto la semana pasada.
San Luis necesitará de esa presión al mariscal contra el mayor pasador de la Liga, Aaron Rodgers.
Buffalo (2-2) en Tennessee (1-2)
Los Titanes han ganado cinco partidos al hilo contra los Bills, a lo largo de 15 años. Para que Buffalo cambie eso, debe reducir las penalidades, y el entrenador Rex Ryan lo reconoce.
“Es más el enfoque, y más las cosas para reconocer las faltas”, expresó Ryan, cuyo equipo encabeza la NFL con 47 penalidades para 428 yardas. La defensiva de Tennessee no tiene el mismo renombre que la de Buffalo.
Chicago (1-3) en Kansas City (1-3)
Sería bueno que los Jefes encuentren la zona de anotación, aunque al menos su pateador es confiable. En una semana en que varios pateadores fallaron goles de campo cruciales e incluso puntos extra, Cairo Santos, de Kansas City, consiguió todos sus siete intentos, un récord en el club.
Chicago también ganó por un pateador, con el gol de campo de 49 yardas de Robbie Gould con 2 segundos por jugar contra Oakland.
En este juego se encuentran dos de los corredores más versátiles de la NFL.
Washington (2-2) en Atlanta (4-0)
Los Halcones han anotado 137 puntos, segundos en la Liga detrás de Arizona y en una semana anómala ya se encuentran 3-0 contra rivales de la División Este de la NFC. Lograron marca de 4-0 por primera vez desde 2012, cuando el equipo terminó 13-3 y avanzaron al juego por el campeonato de la Nacional.
Washington es el mejor general en la Liga dentro del campo, como primero en juego terrestre y segundo a la defensiva. Alfred Morris y Matt Jones son una combinación sólida en el departamento de acarreos.
Arizona (3-1) en Detroit (0-4)
Jim Caldwell hizo lo correcto al ordenar a sus jugadores que dejaran atrás el golpe emocional que supuso Seattle y concentrarse en ganar este partido. Podría ser una buena oportunidad considerando que los Cardenales vienen de un gran desgaste durante su derrota con San Luis, y la presión al mariscal de Leones es destacada.
Aun así, Bruce Arians tiene forma de conseguir sólidas actuaciones.
Jacksonville (1-3) en Tampa Bay (1-3)
¿En busca del reconocimiento en Florida? Es triste que el estado soleado, que cuenta con tres equipos en la NFL, no sean éstos tan buenos como los colegiales Seminoles o Gators.
Al menos los Jaguares fueron una amenaza la semana pasada, llevando a Indianápolis a tiempo extra en un partido que Jacksonville probablemente debió ganar. Los Bucaneros no han triunfado como local (0-10) bajo la tutela de Lovie Smith.
Denver (4-0) en Oakland (2-2)
Los Broncos han ganado en los últimos siete encuentros, incluyendo todos los seis en que Peyton Manning ha sido mariscal. Manning ha llevado a sus equipos siete veces a un inicio de 4-0, fácilmente la mayor cantidad en la historia de la NFL para un mariscal. Pero ha sido la defensiva de Denver, clasificada en lo alto de la Liga, la que ha sido responsable de la marcha perfecta.
Con 18 capturas de mariscal, los Broncos van encarrilados a un récord de 72 ostentado por los Osos de 1984, pero los Raiders sólo han permitido cinco.
San Fco. (1-3) en Gigantes de N.Y. (2-2)
Algunos pensaron en que la Liga desearía flexibilizar este juego y sacarlo del horario estelar esta noche. Luego los Gigantes, no lejos de estar 4-0, aprendieron a tener cierres fuertes. Ahora se perfilan como favoritos dentro de la División Este de la NFC, una atribulada y mediocre.
San Francisco luce como equipo en caída libre.
Cleveland (1-3) en Baltimore (1-3)
Los Cuervos han ganado 13 de sus últimos 14 juegos entre estos equipos, y el último triunfo de los Cafés en Baltimore fue en 2007. Ambas escuadras han estado en algunos resultados cerrados hasta el momento: los Cafés han perdido sus dos partidos previos por un total de 10 puntos y las tres derrotas de los Cuervos han sido por un combinado de 14 puntos.
Cleveland cuenta con la peor defensiva de la Liga. Tendrá un respiro con el principal receptor abierto de Baltimore Steve Smith, inhabilitado por una lesión en la espalda.
N. Inglaterra (3-0) en Dallas (2-2)
Tom Brady puede unirse a Manning y Fran Tarkenton como los únicos mariscales con cuatro inicios de 4-0 iniciando una temporada, y contra los atribulados Vaqueros, es difícil concebir que falle. Los Patriotas promedian 37.8 puntos por partido en una racha de seis juegos que incluye los playoffs de la temporada pasada, y Rob Gronkowski, ala cerrada All-Pro, ha estado imparable.
Dallas se ha atorado tras victorias en sus primeros partidos debido a la baja de jugadores claves.
Nueva Orleans (1-3) en Filadelfia (1-3)
Incluso con un brazo delicado, Drew Brees produjo el touchdown del triunfo ante Dallas, el pase de anotación 400 de su admirable carrera. Presuntamente se encontrará en buenas condiciones cuando enfrente a la defensiva de Filadelfia que suele desinflarse en su propio campo con frecuencia. Las Águilas sólo promedian 22:48 en tiempo de posesión, una receta para el fracaso.
Pittsburgh (2-2) en San Diego (2-2)
Lunes en la noche
Los Acereros tienen marca general de 22-9 contra los Cargadores, pero con Michael Vick detrás de los centros en vez de Ben Roethlisberger, ha sido una ofensiva distinta. Aunque considere lo siguiente: en su último inicio contra los Cargadores, el 15 de septiembre de 2013 con Filadelfia, Vick pasó para un máximo en su carrera de 248 yardas con dos anotaciones, incluyendo una por tierra, y un promedio de eficiencia de 123.4.
San Diego cuenta de nuevo con el ala cerrada Antonio Gates.