Tigres y Rayados por momentos hicieron soñar a sus seguidores pero al final empataron el encuentro, que deja a unos Rayados desahuciados.
El Clásico 109 tuvo llegadas en ambas porterías pero falló la definición.
Monterrey inició con mucha verticalidad en los primeros minutos con un Yimmi Chará que llegaba con gran peligro.
Un par de balones al poste hicieron soñar a los Rayados, que habían dicho que eran el terror de los Tigres.
Era de las peores medias horas de Tigres en el torneo pero Sosa aprovechó un centro de Aquino para anotar el primero al 38′.