Condenan a Tigres errores propios; River campeón de la Libertadores

Una vez más un equipo mexicano se quedó mirando cómo su rival levanta el título de Copa Libertadores. Esta vez fue Tigres, el equipo que prometió no repetiría la historia de Chivas y Cruz Azul, pero River Plate, en su imponente estadio Monumental, los condenó al mismo destino que sus antecesores: el segundo lugar en el torneo más importante de clubes de América,

Los millones que invirtió Tigres en el verano, el glamour que ocasionó la contratación de un jugador francés, André-Pierre Gignac, y todas las comodidades que le facilitó su directiva no sirvieron para evitar la derrota por 3-0 contra un River Plate que celebra su tercera Copa Libertadores en su historia.

Pasaron 19 años para que los verdaderos Millonarios volvieran a un final del torneo sudamericano y no desaprovecharon la ocasión para coronarse. México tiene casi 20 años participando en la Copa Libertadores, lleva tres finales y ninguno de sus equipos ha sido capaz de arrebatar el cetro que los colocaría como el mejor equipo de toda América.

La oportunidad más clara parecía para Tigres. El conjunto de Ricardo Ferretti había superado con facilidad las semifinales y en nómina superaban sin problemas al equipo que dirige Marcelo Gallardo.

La diferencia estuvo en que Tigres fue el equipo con más oportunidades dentro del área, pero fue River Plate el conjunto que anotó los tres goles que se vieron en la final.

Jürgen Damm fue incontrolable para los laterales de River Plate. Los Millonetas se percataron de la calidad del extremo de los Tigres y trabajaron para evitar que el esférico llegara a sus pies.

El exjugador del Pachuca sólo se escapó en tres ocasiones por su banda derecha, las tres las desperdiciaron sus compañeros. Nadie se atrevió a disparar cuando tenían el arco Barovero enfrente.

Caso contrario el de River Plate, no importó que pareciera imposible el intento de Lucas Nicolás Alario. Al minuto 44,  el delantero de River remató de espaldas, con la cabeza, un centro de Leonel Vangioni y anotó el 1-0.

La heroica de ganar a River Plate, de local, ante 65 mil aficionados argentinos, aún parecía lógica para los Tigres en el complemento.

La esperanza fulminó. Carlos Sánchez, el uruguayo, fue derribado dentro del área al minuto 72 y el mismo atacante cobró desde los once pasos.

Entró Joffre Guerrón para tratar de rescatar a los Tigres de Ricardo Ferretti. El ecuatoriano no tuvo tiempo para cargar con el equipo regio. En un tiro de esquina, Ramiro Funes Mori anotó el 3-0 que le dio el título a River Plate y una vez más deja a un equipo mexicano con las manos vacías.

“La afición esperó 19 años para celebrar”

Una larga noche en Buenos Aires, donde el ¡dale campeón!, la vuelta olímpica y el llanto abandonaron el estadio Monumental para seguir en las calles una fiesta que se tardó 19 años.

Así lo recordó el técnico de River, Marcelo Gallardo, el campeón que festeja, y que empapado por la lluvia exclama: “Este título es para la gente de River Plate, la que esperó 19 años. A ellos les digo que celebren toda la noche y que vienen más títulos”.

Difícil quedarse quieto. El estratega argentino corre por todos lados de la cancha, busca a sus jugadores y los abraza. Les dice palabras agradables y vuelve a correr sin rumbo fijo.

Mucho ruido en el Monumental, los cánticos que se prolongan, la gente que permanece en sus butacas, sin ganas de irse. Otro que habla es Fernando Cavenaghi, quien se va del equipo. “Se termina una etapa para mí y me voy orgulloso de levantar esta Copa Libertadores. Era un sueño para mí y lo logré. Este era el título que quería. Sin duda, el mejor día de mi vida”.

JUNINHO ORGULLOSO

En el equipo derrotado, el que se juntó en la banca mientras el River levantaba la Copa, había caras largas y pocas ganas de hablar. El que se detuvo un momento fue el capitán de Tigres, Juninho, quien argumentó que “en el primer tiempo no existimos. Quizá tan sólo cinco minutos. En la parte complementaria despertamos, pero un error y un penal nos hundieron. Yo estoy orgulloso de mi equipo, pues ahora nos conocen por acá. Felicidades al campeón”.

Excélsior