Este Cruz Azul, el de Tomás Boy, es un equipo que sabe jugar y, que conforme avanzan las jornadas, va haciéndose la costumbre de ganar los partidos que disputa.
Ayer, ante el Atlas, el asunto pendiente de La Máquina era ganar su primer compromiso fuera de casa en lo que va del torneo y, de forma contundente, lo cumplió.
Christian Giménez (8’) y el paraguayo Jorge Benítez (22’) marcaron los goles en el estadio Jalisco, donde la Academia ha sumado sólo un triunfo en cinco oportunidades.
El Chaco abrió la cuenta con un remate de primera intención, tras un servicio retrasado de Benítez que a pesar de salir del campo lo contó el árbitro como válido.
Luego, el propio Benítez apareció en el segundo como definidor, siendo asistido por el ecuatoriano Joffre Guerrón por la banda derecha.
Los Zorros no tuvieron cómo restar el dominio visitante, con todo y que el silbante Paul Delgadillo no marcó un penal de Víctor Vázquez sobre Egidio Arévalo.
Con personalidad, La Máquina dio muestra de los conceptos que con Tomás Boy ha aprendido a resolver los partidos, entre ellos el buen manejo del balón y la profundidad por las bandas.
En las pocas llegadas que tuvo en contra, el portero José de Jesús Corona salió a rechazar disparos de Arturo González, Dieter Villalpando y Gonzalo Bergessio, sin problemas.
Para el complemento, hubo cierta mejoría del Atlas, aunque sólo por algunos momentos. Le costó, sobre todo, no poder dar más de dos toques seguidos en el medio campo y perder la intensidad ofensiva.
Con este resultado, el Cruz Azul alcanzó 18 puntos, metiéndose entre los primeros lugares de la competencia. En tanto, el Atlas, que con el argentino Gustavo Costas sumó su cuarta derrota en fila, se quedó con ocho unidades en la penúltima posición del torneo.