El diario Publímetro publicó que en el fútbol muchas veces las pasiones se calientan en la tribuna a tal grado de que los hinchas arrojan objetos a los jugadores como botellas, vasos, bengalas o hasta explosivos.
Sin embargo, en la Superliga de China los aficionados son más “nice” y le avientan iphones a los jugadores, como le sucedió este fin de semana al delantero brasileño Diego Tardelli, del Shandong Luneng Taishan, en el partido que venció 2-1 al Shanghai Shenhua.
Afortunadamente el teléfono no alcanzó a golpear al jugador, quien solo recogió el aparato y se lo mostró al abanderado pero sin pasar a mayores.