De la noche a la mañana los jugadores del Necaxa, Luis Gorocito y Alejandro Molina se pusieron en el ojo del huracán, después que golpearon a un joven al que mandaron al hospital con tres fracturas de cráneo; con estas faltas, los elementos de los Rayos pagarán su deuda en la cárcel. Por ello recordamos 10 casos similares, informó el portal deportivo, FutbolTotal.com.
Omar Gato Ortíz | En 2012, el entonces portero del Monterrey sorprendió a propios y extraños al descubrirse que pertenecía a una banda de secuestradores. Actualmente cumple su pena en el Cereso de Cadereyta, Nuevo León.
Aurelio Coreano Rivera | El defensa es bien recordado por formar parte de los “cachirules” que provocaron que México fuera eliminado de la Copa Mundial de 1990. Sin embargo, esta no es la única mancha en su historial, pues en 1996 fue a prisión casi dos años por atropellar a dos maratonistas.
Ramón Ramírez | El mediocampista vivía una de sus mejores épocas (2000), pero todo cambió cuando mató a cuatro personas en un accidente automovilístico, al final el jugador salió bajo fianza.
Gonzalo Farfán | Si bien ya no jugaba, en 1997 colaboraba con América, al salir de un entrenamiento también golpeó con su carro a tres trabajadores. Tras unos días de estar en prisión preventiva pagó su fianza.
Carlos Álvarez Maya | Mientras militaba en el Necaxa (2003) fue detenido en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con una maleta que contenía un millón 28 mil dólares en efectivo. Aunque alegó que desconocía que el dinero pertenecía al crimen organizado, pero aceptó que le pagaron 3,500 dólares por transportar el portafolio.
René Higuita | Guardameta colombiano que marcó un hito, en 1993 fue directo a la cárcel debido a su intervención en el secuestro y posteriormente liberación de la hija de un amigo. Además, se le criticó su relación con el narcotraficante Pablo Escobar.
Bruno | El portero del Flamengo se entregó a las autoridades en julio de 2010 porque lo buscaban por secuestrar y asesinar a su amante, Elisa Zamudio.
Freddy Rincón | El lavado de dinero es otro delito que sedujo a los futbolistas o al menos así lo demostró el cafetero quien fuera apresado por la Interpol (2007) en Sao Paulo.
César Ccahuantico | Uno de los casos más cómicos, porque el peruano fue condenado a siete años de cárcel (2008) al verse involucrado en el robo de 87 dólares al club Cienciano.
Nizar Trabelsi | El Tunecino tuvo que pagar 10 años de prisión (2003) por colaborar con Al-Qaeda en el tráfico de armas, además de mantener una relación con el terrorista Osama bin Laden.