El púgil californiano Jessie Vargas anunció de manera oficial una protesta ante la Organización Mundial de Boxeo, y la Comisión Atlética de California, en busca de que el resultado de su pelea contra Timothy Bradley, sea cambiado a No Contest y se ordene a una revancha inmediata.
Vargas, acompañado de su asesor Enric Ramón, presentó una carta en la que presenta su molestia y postura sobre lo acontecido el pasado 27 de junio, cuando el réferi Pat Russell detuvo ocho segundos antes de que sonara la campana el duelo ante Bradley, creando confusión en el ring pues Jessie pensó que había ganado por nocaut.
“Mi intención es resolver esta situación de la mejor manera posible, sin herir al boxeo que es mi querido deporte. Yo soy un boxeador y mi vida entera depende del boxeo, y yo sólo les pido que se haga justicia…
“El réferi paró la pelea, y yo estaba confiado en que había ganado por nocaut; advertidos estábamos ambos boxeadores que el réferi pararía la pelea si alguno de los dos estaba lastimado, y sus palabras fueron ‘en mi ring nadie va a morir’”, escribió Vargas en la carta de la que ESPN tiene copia.
Vargas exhibió algunos casos en que los organismos han cambiado la decisión, como lo fue en el caso de la OMB con Marco Barrera, quien en lugar de terminar con nocaut en contra contra Junior Jones, terminó con descalificación, también el del propio Barrera contra Érik Morales, cuando en su primer enfrentamiento la OMB decidió no reconocer al ‘Terrible’.
Información tomada de ESPN