EL ENCAÑONAMIENTO QUE mostró a nivel nacional el líder moral de Morena, Andrés Manuel López Obrador, al tiempo que amenazó a la chiquillada izquierdista que van con él en el Edomex o no van la presidencial 2018, hizo que se prendieran las lámparas en todo en el país y Chihuahua no fue la excepción, en torno a lo competida que está la contienda en la tierra del presidente Enrique Peña Nieto. Las últimas encuestas mostraron un empate técnico entre el primazo Enrique del Mazo y la morenista Delfina Gómez, con un PRD y PAN a escasos 8 puntos, lo que indica una elección por demás competida.
Pero ese es precisamente el escenario que le conviene al PRI. Un voto dinaminatado entre todas las fuerzas políticas de tal suerte que puedan sacar la contienda con el voto duro. Así que los priistas chihuahuitas comienzan a ver una luz al final del túnel, ya que ayer malosos de las alturas colocaban en la primera posición por la Senaduría al ex gobernador José Reyes Baeza, lo que alentó a propios y extraños. Y es que la contienda del próximo año dará para que todos los grupos queden contentos, ya que para todos alcanzará. Es más, ahora sí habrá invitaciones para la fiesta que siempre había sido por demás restringida.
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“NO ME AYUDES compadre”, es lo que deberá decirle el líder supremo de MORENA, Andrés Manuel López Obrador, quien estará en Chihuahua el próximo 18 de junio, al dirigente municipal del partido en Delicias, Enrique Casillas, y es que a través de las rede sociales, varios internautas ya se quejaron del “chavismo” extremo del izquierdoso moreno, al cual acusan de apoyar en demasía al gobierno del venezolano Nicolás Maduro, cuestión que ya ha sido satanizada por los detractores del guinda partido que tendrá de visita a su mesías en unas cuantas semanas.
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HABLANDO DE LOS tricolores, ayer el front de la Planilla RBD, llámese Alejandro Domínguez, aclaró una y otra vez que no impugnarán el proceso de elección del Consejo Político Estatal priista, por lo que dejó claro que la pelea ya no será jurídica sino política. El tema suena por demás peligrosos, ya que la planilla rebelde aceptó que el Consejo tricolor sea ilegal a cambio de que el partidazo siga caminando hacía su renovación. Así que si alguien pregunta de ahora en adelante el Comité Directivo Estatal del PRI se convertirá en el Comité Ilegal Estatal del PRI. ¿A poco no?
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AHORA SÍ QUE sin diputado es como seguirá el Distrito 9 con sede en Parral, pues con el fallecimiento del priista Carlos Hermosillo y la imputación de Antonio Tarín García, quien no logró amarrar la curul y así quedarse con el fuero legislativo, simple y llanamente Parral y sus alrededores no cuentan con un representante en San Lázaro, y según los que más le saben a la tenebra leguleya y electorera, así podría quedarse hasta que se defina la situación judicial del ex director de Adquisiciones de la Secretaría de Hacienda, el cual el próximos viernes podría ser vinculado a proceso por el delito de peculado.
Así que echando cálculos y sacando el ábaco jurídico, lo más probable es que si Tarín es vinculado a proceso, se otorgue un plazo de seis meses para el desahogo de pruebas, por lo que sería aproximadamente hasta noviembre cuando se defina lo que ocurra con la curul que le corresponde a la Capital del Mundo, ya que si es exonerado y sale libre, entonces el mozuelo podría asumir como diputado hasta que concluya la Legislatura en septiembre del 2018, pero si es encontrado culpable, entonces tendrá que ser en esas fechas cuando se convoque a una nueva elección.
Es decir, a finales de año se estarían definiendo elecciones extraordinarias para ungir a un diputado federal, y quien gane, deberá apechugar que sólo cobrará su dieta legislativa por menos de un año, así que redituable no lo es mucho, y menos para el INE y el OPLE, organismos que tendrían que organizar una elección al vapor. Menudo problema en el que los metió el ex colaborador de César Duarte, el ex gobernador que por cierto llegó a San Lázaro por medio de los electores del Distrito 9 en el ya lejano 2006.
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LOS MALOSOS DE las alturas dicen que para nada ha caído bien en el líder nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, el despapaye que se traen sus correligionarios chihuahuitas con la elección del Consejo Político Estatal, sobre todo porque al hombre que él mismo envió para coordinar la sucesión en la dirigencia del Comité Directivo Estatal, el delegado Fernando Moreno Peña, ya fue señalado en las oficinas del CEN por los miembros de la planilla “blanca”, o mejor dicho RBD, pues los comandados por el diputado federal, Alex Domínguez, ya le exigieron al mandón de la familia revolucionaria que destituya al ex gobernador de Colima de su encargo acá en Chihuahua, cuestión que trae más que molesto al mero mero petatero del priismo nacional.
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EL QUE NO da su brazo a torcer y desde Palacio tampoco, es el auditor interino que pretende quedarse como titular de la Auditoría Superior del Estado, Armando Valenzuela, quien ayer fue visto en los pasillos del Congreso del Estado y de paso visitando a Karina Velázquez, la coordinadora de la bancada del PRI y también presidenta de la Junta de Coordinación Política, el organismo legislativo que definirá si “El Oso” se queda como jefe de la ASE. Los malosos que lo vieron entrar a la oficina de la tricolor diputada afirman que acudió so pretexto de entregarle un informe de avances de las cuentas públicas, lo que despertó suspicacias de lo que pudiera acordarse previo a la reunión de la Jucopo, ya que el “informe” debe ser entregado a la Comisión de Fiscalización, no a la principal opositora de Valenzuela en la ASE.
Source: Columna