Cimbró sobremanera al gabinete estatal y los médicos de la Secretaría de Salud, el lamentable fallecimiento del doctor Jesús Grajeda, quien desde agosto de 2018 fungió como el mandamás de la Salud en la entidad al suplir al polémico Ernesto Ávila. Con su llegada, se terminaron los escándalos en la dependencia, esa que le dio los primeros dolores de cabeza al gobernador Javier Corral cuando el médico militar estaba al frente. Y fue precisamente el mandatario estatal quien informó de la triste noticia ayer domingo, se le notaba el pesar en las palabras escritas en sus redes sociodigitales, pero como la vida tiene que seguir y la lucha contra el COVID-19 también, en las próximas horas, el góber nombrará al nuevo titular de la Secretaría de Salud, pues a pesar de que los médicos no han cesado en la batalla contra el virus, la irresponsabilidad ciudadana y la fallida estrategia del gobierno federal, han desatado los contagios y los fallecimientos, que en Chihuahua ya son 7,474 casos confirmados acumulados y 868 muertos. La lucha tiene que seguir.
Por lo pronto, hoy el gobernador Javier Corral, a las 8 de la mañana, rendirá un homenaje de manera virtual al doctor Grajeda, acompañado del exgobernador Pancho Barrio y el rector de la Universidad Autónoma de Chihuahua, Luis Fierro. En paz descanse el doctor Grajeda.
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Con todo y que deberíamos estar en semáforo rojo debido al incremento en los contagios de COVID-19, el fin de semana fue un tremendo estira y afloja entre los gobiernos estatales con el subsecretario de Salud del gobierno federal, Hugo López-Gatell, a quien los muertos se le siguen acumulando y las excusas también, es así que este día, el gobernador Javier Corral informará de manera oficial el color del semáforo, además de que presentará el semáforo regional que se aplicará en la entidad, con la intención de intentar que los ciudadanos se desboquen aún más, como lo ha hecho en las últimas semanas, en que la raza se puso daltónica, ya que les dijeron naranja y lo confundieron con el verde. Además, también se presentarán las medidas restrictivas que buscan ponerle freno a la irresponsabilidad de los ciudadanos, algunos, que incluso niegan la existencia del virus.
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Cambiando a terrenos grillos y ante las declaraciones de Emilio Lozoya, exdirector de Pemex, de que el gobierno de Enrique Peña Nieto sobornó a legisladores del PAN para que aprobaran la reforma energética, algunos estuvieron esperando que el nombre del senador Gustavo Madero saliera a relucir, pues en aquel 2013, don Gustavo fungía como dirigente nacional del PAN y su otrora hijo putativo, Ricardo Anaya, como coordinador de la bancada azulada, cuyo nombre sí se mencionó y hasta cifra le pusieron a los supuestos sobornos que recibió. Los malosos de las alturas aseguran que “ensuciar” a Madero depende de lo que suceda acá en Chihuahua en la carrera por la gubernatura, y por lo pronto, esa ficha no será utilizada por la 4T, que ante la crisis económica, de salud y la violencia imparable, utiliza a Emilio Lozoya como una cortina de humo para ocultar la ineptitud, además de que, así como César Duarte, será utilizado para acomodar calabazas en el proceso electoral que tendrá su culminación el 6 de junio de 2021.
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Continuando con los encarrerados por el 2021, el que así anda es el senador Cruz Pérez Cuéllar, quien busca la candidatura de Morena a la gubernatura, tanto, que este fin de semana anduvo de gira por la Sierra Tarahumara, en donde sostuvo reuniones con la militancia. El legislador estuvo en Guachochi, Guadalupe y Calvo y Urique, similar a la ruta que siguió el súper delegado Juan Carlos Loera la semana pasada, que con el pretexto de entregar apoyos sociales, también anda encarrerado con la precampaña. Y es así como ellos, uno como encargado de los programas federales y el otro como senador, que pueden recorrer el estado para hacer su luchita, mientras que quien de plano no prende es el consejero independiente de Pemex, Rafa Espino, a pesar de ser el preferido del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Source: Columna