Ya son varias las personas que han denunciado y se dicen ser testigos, de que el miércoles durante el transcurso de la mañana y previo a la marcha del 8M en la ciudad de Chihuahua, observaron cómo llegaban autobuses a la Central Camionera con personas, hombres y mujeres, vestidos de la manera en que iban los más agresivos durante la Marcha, a pesar de que ahí ya traían la capucha que evitaba verles el rostro, sin embargo, la gente que logró observar esa afluencia en la Central de autobuses que ese día estuvo fuera de lo normal, afirman pudiera tratarse de esos infiltrados que armaron los grupos de choque que además de desacreditar la lucha de las mujeres chihuahuenses, realizaron múltiples destrozos en Palacio de Gobierno, Rectoría de la UACH, Presidencia Municipal y en el Congreso del Estado, así que de nueva cuenta vuelve a tomar fuerza esa acusación del PAN de que fueron líderes de Morena quienes contrataron a infiltrados para deslegitimar la causa feminista y de paso destrozar los edificios gubernamentales. Así que por ahí debería indagar la Fiscalía General del Estado, precisamente revisar la bitácora de salidas y llegadas antes y después del 8M, para que así, por fin, se sepa la verdad detrás de la marcha más multitudinaria, pero a la vez con más daños y estragos.
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Y porque en la vida política no falta quién se muerda la lengua, así le sucedió al súper delegado Juan Carlos Loera, quien fiel a su costumbre de opinar en todo como si él tuviera la cola muy corta, cuando en realidad tiene una lengua muy larga y una cola enorme fácil de pisar, se puso a criticar a los empresarios que exigieron detener a los infiltrados que causaron los destrozos en los edificios gubernamentales, al afirmar que son los mismos que aplaudieron cuando los agricultores de Ojinaga le hicieron ver su suerte a Loera de la Rosa cuando en plena sequía y con la presa El Granero casi vacía, la 4T abrió las compuertas para según ellos cumplir con el pago del Tratado, o cuando los productores también tomaron la presa La Boquilla y cerraron las compuertas.
Vaya, a Loera no se le olvida el por qué perdió la gubernatura y todavía trae el rencor en contra de los agricultores, nada más que en otra de las grandes cosas en las que también se equivoca el “súper” delegado, es que las acciones de la 4T, solapadas por él mismo, no sólo afectaron y afectarían a los “acaparadores” y “grandes nogaleros”, sino a todos los campesinos y pequeños productores que no nada más se conforman con las migajas cuatroteras y sus “ayudas” sociales. Loera no entiende, que no entiende y nunca entenderá a esa región del estado de Chihuahua, esa que a lo largo de los siglos ha fraguado la historia de este gran estado. Además, bien vendría recordarle que él y miles de hombres más son la razón por la que las mujeres marcharon, o ya no se acuerda las denuncias que tiene en su contra por ejercer violencia contra las mujeres.
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Si de morenos se trata, y con eso de que los maestros de la Sección 42 andan fúricos y lo que le sigue con el servicio de Pensiones Civiles del Estado, los que se reunieron con el líder sindical Manuel Quiroz, fueron precisamente diputados locales de Morena encabezados Óscar Avitia, quien anda más que metido en asuntos de educación y trae consigo a un amplio sector de maestros de la 42, así que el legislador se reunió de nuevo con el líder sindical y de paso acopló a sus colegas diputados, desde el coordinador Cuauhtémoc Estrada, hasta Benjamín Carrera y América García, “la esperanza del noroeste”, diría el tío Pichú.
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Qué suerte tiene los que engañan y viven en la simulación, dirían algunos, el caso es que quien estuvo de visita en la librería del ex(des)gobernador Javier Corral este fin de semana que se fue es ni más ni menos que el excandidato presidencial y fundador del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, visita que fue presumida por todo lo alto por don Javi, quien tuvo como visitante en su librería al que durante décadas fue el líder moral de la verdadera izquierda mexicana, no como el pseudo “liberal” que vive en Palacio Nacional. Ya sólo falta que el Ingeniero se dé cuenta, así como lo hizo con el tabasqueño, que su “amigo” Corral es de los que también simula ser anti corrupto y que lucha por el “pueblo”, cuando al igual que AMLO, destruyen todo lo que tocan.
Source: Columna