Ashton Kutcher decidió que era tiempo de vivir en un rancho, donde seguiría trabajando pero con un humor distinto al que lo caracterizó en That ‘70s Show y Two and a half men, y lo hizo en The Ranch.
Con playera blanca, suéter gris y una argolla dorada en el dedo anular de la mano izquierda, la pareja de Mila Kunis debuta como productor en esta serie de Netflix.
Kutcher consideró que la forma de ver entretenimiento ha cambiado, y eso ha derivado en el surgimiento de plataformas como éstas, donde el público elige qué ver a la hora que quiera y sin restricciones.
No teme, dijo, que el público que vive fuera de Estados Unidos no comprenda su humor.
“No creo que la comedia latinoamericana sea de un solo tipo, desde mi punto de vista hay algo de comedia muy satírica”, comentó el actor estadounidense ayer durante la presentación de su espectáculo en Argentina.
Perseguido. Su presencia en el país sudamericano no pasó inadvertida. Paseó por algunos sitios emblemáticos de la capital como la Floralis Genérica, que adorna la Plaza de las Naciones Unidas, e incluso presumió una playera del equipo local con el número 10 y la leyenda “Kutcher”.
Las fans también supieron rápidamente en qué hotel se hospedaba y fueron a buscar al histrión para tomarse una foto con él.
A su proyecto se unieron los escritores de Two and a half men, Jimm Patterson y Don Reo, y volvió a hacer mancuerna con Danny Masterson, con quien ya había trabajando en la serie That ‘70s Show.
Información de El Universal