Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Queen revela que la clave para ser más sexy no es un factor aislado, sino la concordancia entre diferentes características que consideramos atractivas.
Según el Dr. Nikolaus Troje, líder de la investigación, la gente tiende a encontrar atractivas a las personas que suelen tener cierta armonía en su apariencia física y actitud. Por ejemplo, si alguien encuentra sexy a una persona rubia, esto no significa que que le gusten todas las rubias, sino sólo las que llevan esta característica de forma natural, divulga el diario de la universidad.
Los científicos se dieron cuenta que mezclar atributos considerados atractivos por la mayoría en una sola persona no es garantía de que el resultado será aceptado universalmente como ‘sexy’, y es que el ojo y la mente humana tienden a detectar mentiras o la falta de correspondencia entre una característica y otra.
En otras palabras, ‘para ser sexy, sólo debes ser tú mismo pues la gente notará cuando adoptas una apariencia o actitud que nada tiene que ver contigo’.
Así es, la ciencia acaba de descubrir que no vale la pena fingir algo que no eres, sino ser tal cual como naciste.