Salma dice que la discriminan por ser mexicana

Salma Hayek asegura que ha sido víctima del sexismo y la discriminación de Hollywood.

Durante el panel Women in Motion que organiza The Hollywood Reporter en el Festival de Cine de Cannes, la mexicana contó que un ejecutivo le dijo una vez que ella podría ser una gran estrella… de no ser mexicana.

“Me comentó: ‘eres inteligente, talentosa y bella, pero naciste en el país incorrecto. Al menos fue sincero”, señaló la actriz.

Asimismo, compartió que un director, de quien se reservó el nombre, no logró que los ejecutivos de un estudio la aceptaran como protagonista de una película de ciencia ficción.

“Le respondieron: ‘¿una mexicana en el espacio?'”.

Hayek lamentó que la industria hollywoodense no quiera darse cuenta de que las mujeres son un imán de ingresos en taquilla.

“Lo único que podemos hacer es mostrarles que somos una fuerza económica, porque ninguna otra cosa los moverá. En el minuto que vean dinero, las cosas serán diferentes, hay que mostrarles el dinero”, expuso.

Otro de los problemas de la industria fílmica, consideró, es que el género femenino es ignorado como audiencia y no se hacen películas para complacer a las mujeres.

“¿Qué pasaría si alguien empezara a hacer películas que queremos ver? Los ejecutivos piensan que las chick flicks y las comedias románticas son lo que queremos. Pues, ¿qué creen?, somos más inteligentes que eso”, dijo.

Finalmente, lamentó la disparidad de salarios y que sólo en la moda y la pornografía una mujer gane más que un hombre. Además, dijo que no entiende por qué los actores pueden tener injerencia en el desarrollo de sus coestrellas femeninas.

“Muchos de los grandes actores tienen en sus contratos la capacidad de aprobar a sus compañeras. El hecho de que él pueda decidir a quién besar lo encuentro muy sexista… Y no les gusta cuando un personaje femenino es fuerte”.

Sus cuentos la hacen feliz

Tras presentar el viernes El Cuento de los Cuentos, película en competencia por la Palma de Oro, Salma Hayek pasó una jornada entera hilando una tras otra las entrevistas con la prensa internacional.

Pero la mexicana no se mueve de su sillón ni interrumpe sus respuestas. Apenas se levanta 10 minutos para comer o cumplir alguna necesidad natural y, hacia el final del día, termina por quitarse los tacones Gucci para descansar un poco.

Lo importante es que está disfrutando mucho esta presentación en Cannes con una propuesta de cine de arte que, asegura, es uno de sus objetivos.

“Me impresionó cuando vi la proyección. Sé que no es para todo público, pero es el tipo de película que me gusta hacer y estoy tan feliz de ser parte de esta historia tan única”, dijo.

Pero ella también ha dejado buena impresión en el evento fílmico gracias a su estilo al vestir. La mínima presentación de Hayek se transforma en una vitrina de todas las marcas de casas de alta constura del grupo Kering, propiedad de su marido François-Henri Pinault.

Sin embargo, reconoce que tiene tanto de donde escoger, que se le complica elegir su vestuario del día.

“Sí, hoy tengo acceso a muy diversos diseñadores, pero con todas esas posibilidades es más difícil decidir”, admitió.

“Por eso, todo mi equipo me ayuda a elegir lo que me pongo, tenemos un sistema muy democrático, cada uno opina y votamos; en ocasiones hasta incluyo a mi marido cuando anda por ahí”.

 

Agencia Reforma