En Japón, el supertifón Hagibis ya ha dejado 56 muertos, unos 200 heridos y 15 desaparecidos. La cifra de las víctimas mortales podría aumentar.
El centro y este de Japón están prácticamente bajo las aguas por el paso del huracán más potente de los últimos 60 años, que azota la isla desde el pasado sábado. El fenómeno ya ha provocado grandes deslizamientos de tierra e inundaciones catastróficas. Así, algunas áreas recibieron hasta el 40 por ciento de las lluvias promedio anuales en tan solo unos pocos días.
110 000 rescatistas fueron movilizados a varias zonas para ayudar a los damnificados. Mientras, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, ha llamado a responder de manera rápida y apropiada a este desastre.
Hagibis, clasificado como un tifón violento, ha obligado a 50 000 personas a resguardarse en lugares seguros y con provisiones. Ahora temen una drástica bajada de las temperaturas por el paso del ciclón.
El tifón, acompañado de ráfagas de viento de más de 200 kilómetros por hora, que mantiene en alerta a Japón, ha paralizado además Tokio (capital de Japón). Unos 7,3 millones de japoneses recibieron consignas de evacuación. 92 000 personas se quedaron sin luz y 120 000 sin agua.
El pasado mes de septiembre, el tifón Faxai dañó 30 000 hogares en el país asiático, la mayoría de los cuales todavía no han sido reparados.
Source: Mundo