El presidente municipal de Cusihuiriachi, Enrique Estrada Gutiérrez, acusó al estado de arbitrario e indicó que está trabajando bajo presión, más que con apego a la legalidad, al retirar los sellos de clausura colocados por el municipio a la compañía minera Dia Bras, debido a severos daños al medio ambiente.
Luego de la colocación de los sellos por contaminación de arroyos en la región mencionada, funcionarios estatales -acompañados por agentes ministeriales-, acudieron a la cabecera municipal para retirar la clausura e indicar que el Ayuntamiento no tiene facultad para realizar este tipo de acciones.
Ante esto, el alcalde afirmó que la ley faculta a los municipios para actuar en caso de existir algún riesgo que afecte a la población, tal y como lo que se encuentra sucediendo en la región, en donde se han detectado a simple vista residuos contaminantes en el acuífero, situación que actualmente se encuentra siendo analizada por un laboratorio que dará los resultados la siguiente semana.
Estrada Gutiérrez detalló que fue solicitado a la compañía minera los estudios de impacto ambiental, sin embargo se negaron a entregarlos, presumiendo que posiblemente estos no cuenten con los requisitos requeridos para operar y por ende trabajan en la ilegalidad, además de que han omitido pago de impuestos correspondientes al predial, entre otros conceptos.
El edil manifestó que se presentaron los elementos de prueba a funcionarios de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de gobierno del estado, pero se ignoraron los argumentos del Ayuntamiento, levantando la clausura y al reunirse con el secretario general de gobierno, Mario Trevizo Salazar, este le mencionó que existen presiones para dejar operar a la empresa minera.
Las autoridades municipales estarán denunciando el caso ante una corte federal, incluso se está analizando solicitar el apoyo de organismos internacionales, relacionados con el cuidado del medio ambiente.
“La presencia de la minera en Cusi afecta más que lo que beneficia, ya que no contribuye en nada al municipio. No paga impuestos, daña vías de comunicación y sobre todo contamina al medio ambiente y eso lo pueden corroborar ambientalistas que estuvieron en la cabecera municipal, quienes alertaron por posible presencia de metales pesados en el agua”, denunció.
Con información de Red Noroeste