De acuerdo al CONEVAL, en su Informe Anual Sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social de este año, el Indicador que mide la población de Chihuahua que habita en viviendas de mala calidad de materiales y espacio insuficiente, fue de 6.4 por ciento, y el de carencia de los servicios básicos, alcanzó apenas el 7 por ciento.
Esta información sitúa a nuestra entidad en mejores condiciones que la registrada a nivel nacional, en donde la carencia por calidad y espacio en la vivienda es de 15. 3 por ciento, y el de carencia de servicios básicos es de 22.9 por ciento.
Agregó que los municipios de Balleza, Batopilas, Guazapares, Maguarichi, Guachochi y Guadalupe y Calvo, por ejemplo, tienen niveles de carencia en la calidad de la vivienda desde el 21 hasta el 50 por ciento en el orden respectivo, y en estos mismos municipios, el otro indicador asociado con la vivienda digna y que es el de las carencias de servicios básicos en la vivienda, se elevan desde el 55.8, como es el caso de Balleza, y en el caso de Batopilas, hasta en un 94.6%.
En contraste con los municipios serranos señalados, los porcentajes de rezago en calidad y espacios, así como la carencia de servicios básicos de la vivienda en municipios urbanos, son diametralmente diferentes.
Por ello el Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza consideran de suma importancia hacer un llamado urgente para que las autoridades cumplan con su obligación constitucional y legal respecto al derecho a una vivienda digna, y bajo un esquema incluyente de participación, continúen realizando acciones de promoción, concurrencia, colaboración y coordinación entre los tres niveles de gobierno, a fin de dar efectivo cumplimiento a las leyes de la materia, diseñando estrategias y aplicando mecanismos adecuados y pertinentes de manera inmediata para invertir los recursos destinados a los programas nacionales de vivienda digna y vivienda rural.