Representantes de los tres poderes del Estado, así como integrantes de la Gran Logia Cosmos de Chihuahua se reunieron en el monumento de Benito Juárez ubicado en la avenidas Colón y Juárez, para conmemorar, con una guardia de honor, el 210 aniversario del natalicio del Benemérito de las Américas, Benito Juárez García.
Como cada año, Benito Pablo Juárez García es recordado por el impulso que dio a la Constitución Mexicana de 1857 y a las Leyes de Reforma durante las varias ocasiones que estuvo al frente del porder ejecutivo de la Nación, desde donde también propugnó por las garantías individuales basadas en ideales liberales que lo confrontaron con la ideología conservadora que dominó en México durante muchos años.
La revolución liberal iniciada por Juárez que buscaba la eliminación de los privilegios a militares y religiosos causó el repudió y el no reconocimiento de los grupos del poder que buscaban mantener su posición.
Esta disputa intestina llevó al originario de Oaxaca a llevar un un gobierno itinerante en aras de sostener el orden del país, el cual lo llevó a instalarse, por un momento, en Chihuahua en 1864, con lo que el estado norteño se convirtió en la sede del Gobierno Federal.
En su discurso, el director del Instituto Chihuahuense de la Cultura, Sergio Reaza, recordó que reconocer a Juárez es reconocer el triunfo de la ley, la consolidación del binestar y del honor a la patria. “A Juárez se le recuerda como el estadista cuidadoso de la justa y perfecta aplicación de la ley hasta el extremo de las fuerzas y del sacrificio personal”.