La diputada América Aguilar congratuló la decisión de la Suprema Corte de Justicia, que declaró la inconstitucionalidad al artículo 19 de la Ley del Estado de Campeche que prohibía la adopción por parte de parejas homoparentales y, por lo tanto, caía en discriminación, además, aclaró que el permitir que todos los mexicanos gocen de los mismos derechos constitucionales es un avance en materia de igualdad y justicia.
Explicó que la adopción siempre debe de realizarse en interés del menor, es decir, esto debe de ser la mayor prioridad: “Sin duda, cualquier legislación debe de asegurarse de que la adopción se dé con los parámetros y estándares que permitan al menor garantizar sus mejores condiciones” razón por la cual, aseguró que el argumento de atacar a la adopción homoparental en aras de “proteger” a los menores, es una falacia, pues tiene de fondo una idea erronea: que la adopción por parte de parejas del mismo sexo les provoca un daño.
“Podría hablar de muchos estudios psicológicos y muchas investigaciones, que demuestran que los menores que crecen en hogares homoparentales no tienen diferencias en términos de desarrollo, de su salud, o de su psicología, pero sin necesidad de hacerlo, creo que esto se trata de simple sentido común, algo que todos sabemos en realidad: es la calidad de los padres y la educación que proveen lo que determina el buen desarrollo de los menores, no la orientación sexual de ellos, y sí, decir que una persona será un “padre menos capaz” por ser homosexual, es discriminación” explicó la diputada “porque estamos demeritando lo que una persona puede realizar en base tan solo a su orientación sexual, algo que es parte de una persona, no que lo define como ser humano”.
“Hay que tomar en cuenta que reconocer jurídicamente a los niños lejos de un perjuicio, traerá beneficios, pues entre más incluyente y justa sea la sociedad, mayormente los niños podrán desarrollarse de mejor manera en ella” aseguró la legisladora “La capacidad sentir, de formar vínculos con otras personas, de plantearse metas y cumplirlas, de desarrollarse en la paternidad y maternidad, no varía de una orientación sexual a otra.”