Maestros disidentes de Chihuahua exigieron al gobierno federal frenar la represión y la escalada de violencia en contra del magisterio en estados del sur del país que están luchando contra la reforma educativa.
Los docentes denunciaron que la detención de los dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) son parte de la represión del gobierno federal en su intento de defender una reforma que no ha sido aceptada por un consenso social.
Los maestros señalaron que lo que busca el magisterio disidente es un diálogo con la federación para realizar una verdadera Reforma que atienda temas educativos y no solamente laborales en contra de los docentes.
Señalaron que la mal llamada reforma educativa fue impuesta por una cúpula gubernamental y empresarial, sin tomar en cuenta a los verdaderos conocedores de la educación en México y sus retrasos, los maestros y padres de familia.
Se ha destacado que está reforma impulsada por organizaciones empresariales busca tener un control sobre los maestros disidentes, mediante una mal aplicada evaluación docente, y dejarlos fuera del camino para llevar a la educación pública a su privatización.
“Nuño debe entender que no puede continuar impulsando una reforma que no beneficia en la educación pública ni a la calidad, sus intentos de mantener a flote esta Reforma están ocasionando una escalada de violencia en el sur del país”, detallaron.
Aclaró que se está buscando dar la impresión de que son los maestros los causantes de esta escalada, implementando el “di una mentira mil veces y se convertirá en verdad”, pero lo cierto es que los maestros en el sur, apoyados por padres de familia, están realizando plantones y cierres con el fin de exigir el diálogo con la Secretaría de Educación Pública.