La mujer embarazada puede recibir el tratamiento dental que precise, de preferible después del tercer mes de embarazo (aunque si es una urgencia debe de atenderse de inmediato); siendo lo más recomendable la prevención y la limpieza dental diaria.
Lo anterior lo informó la doctora Laura Garza Villarreal, promotora de Estomatología, de la Unidad de Medicina Familiar No 33 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua, quien destacó que las caries y las periodontopatías, (enfermedades de las encías), son las enfermedades bucales más frecuentes en la etapa del embarazo.
Enfatizó que es necesario prevenirlas y atenderlas de manera oportuna y adecuada especialmente durante el periodo de gestación es muy importante que la mujer tenga una correcta y adecuada higiene oral, así como una dieta equilibrada.
Garza Villareal detalló que en el embarazo se manifiestan una serie de cambios fisiológicos, psicológicos y de conducta que pueden repercutir en la cavidad bucal, provocando un mayor riesgo de caries y de enfermedad de las encías.
Por eso, resaltó, la mujer embarazada debe acudir a revisión periódicamente con su odontólogo, para que le indique si padece alguna patología de su cavidad bucal. De ser así, deberá de establecer los tratamientos preventivos y curativos adecuados.
Asimismo, comentó que la caries durante el embarazo puede causar desde molestias comunes hasta la pérdida de los órganos dentarios, con consecuencias psicológicas, estéticas y funcionales de la boca.
Indicó que a medida de que el embarazo avanza, cambia el hábito de la alimentación, además de preferir cierto tipo de alimentos (antojos), así como dulces o ácidos que pueden ocasionar la aparición de caries.
Agregó que otro factor de riesgo para este padecimiento, son los vómitos o reflujo del ácido del estómago, el cual provoca una desmineralización del esmalte del diente, volviéndolo susceptible.
Señaló también que los cambios hormonales que acompañan al embarazo y el descuido en la higiene oral, favorece la aparición de gingivitis, que es una inflamación y enrojecimiento de las encías que puede provocar dolor y tendencia al sangrado.
Por lo tanto, enfatizó que la limpieza diaria de los dientes es de suma importancia, así como la eliminación del sarro o cálculo dental (profilaxis), son la alternativa para evitar las enfermedades periodontales.
La doctora del Seguro Social hizo hincapié en que el embarazo no es una enfermedad, por lo que una mujer embarazada puede recibir el tratamiento dental que requiera.
“Pero es mucho mejor utilizar las estrategias preventivas, para educar a las pacientes en los métodos de cepillado dental adecuado, el control de la placa dentobacteriana, el uso del hilo dental, el uso de enjuagues, y la información sobre una alimentación saludable”, concluyó.