A pesar de que la Comisión Nacional de Agua (Conagua) ha declarado el riesgo en el que se encuentran distintos acuíferos en el estado de Chihuahua, los proyectos del fracking -para los cuales se necesitan grandes cantidades de agua- continúan en pie y se busca que estos se extiendan en mas municipios, denunció el grupo Chihuahua vs Fracking.
Para continuar con la lucha, se estarán sumando activistas ecologistas de Greenpeace, por lo que el domingo que viene se tendrá una reunión frente a Palacio de Gobierno para denunciar los efectos negativos que tiene la fracturacion hidráulica en las regiones en donde se practica, informó Adrián Carrillo, representante del movimiento.
Afectaciones al medio ambiente, desajustes en el subsuelo por explosiones químicas y contaminación del agua, son algunos de los problemas que se han generado en otros paises al aplicar la fracturación hidráulica para la generación de energía más barata.
Con la aprobación de la Reforma Energética, estados como Chihuahua iniciará con una serie de prácticas de generación y explitación de energía, por lo que asociaciones y organizaciones civiles han comenazado una serie de manifestaciones para exigir un debate técnico donde se presenten los riesgos del fracking.
Uno de los señalamientos tiene que ver con el tema de la inseguridad en cuanto a la operatividad el proceso en sí, debido a los constantes señalamientos referentes al aumento de la actividad sísmica en las regiones donde se está practicando dicha actividad, ya que la reinyección a presión de aguas, la fractura de las rocas en el subsuelo y otros componentes generan asentamiento del suelo, después fracturación y extracción del gas lo que provoca terremotos en lugares donde no se tenían antecedentes.
En relación a la presión para caminos y carreteras, así como la contaminación del ruido para los pueblos, se destaca que una plataforma de seis pozos requiere entre 8 y 12 meses de perforación continua, día y noche, además de 4 mil a 6 mil viajes en camión para la construcción de una plataforma, provocando presiones en pueblos y carreteras cercanas a las explotaciones.
El impacto sobre el paisaje y la destrucción de la flora o fauna es otro de los problemas inherentes a la práctica, debido a que para realizarla se aplana y se desmontan superficies de más o menos una hectárea y media. El desierto de Chihuahua es el número tres en biodiversidad en el planeta, por lo que la perturbación de especies endémicas que evolucionaron durante millones de años podría afectar el ecosistema de manera irreversible.