La impactante noticia que causó el enojo de la sociedad chihuahuense, en la que un niño de seis años fuera asesinado por un grupo de adolescentes, es similar al caso ocurrido en Inglaterra, cuando dos menores de diez años secuestraron y asesinaron a James Bulger, un menor de apenas dos años.
Cristopher fue invitado a jugar por sus agresores el jueves de la semana pasada, ese mismo día fue torturado y asesinado por dos adolescentes de trece años, un niño de 12 y otros dos de quince, estos últimos serán los únicos que estarán pagando el crimen en la cárcel.
En el mismo tenor, James Bulger de dos años fue convencido en un centro comercial de ir a jugar con los menores Robert Thompson y Jon Venable. Se indicó en el juicio que uno de los chicos lanzó pintura para maquetas en el ojo izquierdo de Bulger, le dieron patadas, lo golpearon y le tiraron ladrillos, asi como piedras.
Le introdujeron pilas en la boca, le arrojaron una barra metálica de diez kilógrmaos, provocándole diez fracturas craneales. Posteriormente, antes de marcharse del crimen, los chicos dejaron a Bulger acostado en un riel y taparon la cabeza con escombros, con la esparanza de que un tren lo golpeara y la muerte pareciera un accidente.
En este sentido se desarrolla también el asesinato de Cristopher, es torturado y golpeado con piedras. Los adolescentes caban un hoyo, echan el cuerpo del menor y tratan de disimular cubriendo con hojas y un animal muerto.
La diferencia es que los asesinos de Bulger fueron juzgados y sentenciados a cárcel, pero la justicia inglesa esperó a que estos tuvieran 18 años para internarlos y por el tiempo en el que se encontraban fuera tuvieron que aceptar diferentes medidas sancionadoras. En México las leyes que se tienen prohiben abrir un proceso a menores menores de catorce años.
La clasificación del homicidio en Chihuahua
El homicidio que fue ejecutado por los adolescentes es clasificado como “homicidio por emoción de grupo”, mismo que de acuerdo con el Manual de Clasificación del Crimen (CCM-III) se considerá también por presentar un sadismo sexual.
Carlos Quiroz, interrogador forense de la Fiscalía General del Estado (FGE) explica que la sicopatología que más se presenta en dicho homicidio por emoción de grupo es el sadismo sexual, misma que se caracteriza por generar placer sexual a partir del dolor de una víctima que es vulnerable.
El especialista señaló que la responsabilidad de los legisladores y jueces es no minimizar las consecuencias penales a los agresores por su edad, puesto que es complicado que un perifil sociopático se recupere, mismo que podría en algún momento tener problemas con pedofilia.
Es necesario mencionar el último punto anotado por el especialista, puesto que Jon Venables -asesino del menor de dos años- fue encontrado tiempo después y acusado de portar/distribuir pornografía infantil.