En el marco del XXXII aniversario del Instituto Municipal de Pensiones (IMPE), el colombiano Rafael Reyes impartió una conferencia donde compartió experiencias de su vida, encaminadas para ayudar a las personas a superar crisis existencial a través del cambio de mentalidad.
“Todo depende del cristal con que se mire”, dijo el ponente de América del Sur, quien no tiene brazos ni piernas debido a una malformación de las extremidades denominada “focomelia”, lo que consiste en la ausencia de elementos óseos y musculares.
El joven conferensista recomendó al público tener “lugares felices” en el mundo, es decir, cuando se tenga un problema acudir a la familia, un grupo de amigos, tocar música o realizar una actividad que le cause alegría para superar el día difícil por el que haya pasado.
Dijo que todos, como él, deben aprender a aceptar su propio cuerpo, pues “mi cuerpo es diferente pero sigo siendo persona… seremos muy diferentes por fuera pero por dentro todos somos iguales, todos tenemos un corazón que late”, comentó al realizar una actividad interactiva con los asistentes.
“Todos los días debemos que ser felices con lo que tenemos y dejar de llorar por lo que no tenemos… si el cielo es el límite, vamos al espacio”, exhortó.
En la conferencia estuvo presente el alcalde Javier Garfio y su esposa Aidée.
Rafael Reyes Velasco es Ingeniero Biomédico, Músico, Conferencista y Empresario. Es originario de Bucaramanga, Colombia y radica en Ciudad de México desde sus 2 años de edad.
“Rafa”, como lo llaman todos, tiene nació sin brazos y sin piernas. Se cree que esto sucedió debido a que su mamá sufrió un accidente en motocicleta en los primeros meses del embarazo y recibió gran cantidad de radiación con las radiografías que le fueron tomadas estando inconsciente.
Lo impresionante de la historia de Rafa es que su discapacidad no le ha impedido en ningún momento alcanzar sus objetivos: cursó toda su educación en escuelas regulares, estudió Ingeniería Biomédica en una de las mejores universidades del país, el último semestre de su carrera lo llevó a cabo de intercambio en Toronto, Canadá; aprendió a tocar un instrumento en Toronto, Canadá y estudió Ingeniería en Audio y Producción Musical en una de las mejores academias privadas de música.
Usa una patineta como medio de transporte y maneja una camioneta adaptada con un dispositivo que él mismo ayudó a diseñar. Actualmente Rafael trabaja como Ingeniero en Desarrollo de Asistencia Tecnología. Su trabajo consiste en diseñar, adaptar y difundir tecnología a bajo costo para que las personas con discapacidad puedan realizar sus actividades cotidianas.