Julián Leyzaola Pérez es un ex militar en estado de retiro, nació el 27 de febrero de 1960 y Culiacán, Sinaloa y fungió como Secretario de Seguridad Pública de Ciudad Juárez durante la administración de Héctor Murguía Lardizábal.
Después de trabajar como secretario de seguridad pública en Tijuana se le atribuyo el haber «limpiado» y logrado disminuir la alta criminalidad que azotaba la ciudad debido al narcotráfico hasta en un 70%.
En Tijuana lanzó un contraataque hacia las organizaciones criminales y a los policías corrompidos que permanecían dentro de la corporación, lo que resultó en múltiples intentos de asesinato hacia el mismo Teniente Coronel leyzaola.
Leyzaola fue declarado como secretario de seguridad de Tijuana reemplazando a Jesús Alberto Capella Ibarra en diciembre de 2008, fecha en que la ciudad padecía una ola incesante de violencia, de la cual era plaza del cartel de Tijuana.
La estrategia para desmantelar la corrupción policíaca, según su ideal, era sustituir mandos policiales, por mandos policiales de carácter militar al igual que incrementar el parque vehícular con el que contaba.
El 29 de agosto fue inhabilitado por 8 años para ejercer cargo en la función pública de Baja California al comprobarse violaciones a los derechos humanos en la modalidad de tortura, abuso de autoridad y uso excesivo de la fuerza pública, cuando estaba al mando de la policía municipal de Tijuana.
Posteriormente, demandó un juicio de anulación de su inhabilitación ante los juzgados de Baja California, comprobándose un interés político, por lo que se anuló la inhabilitación devolviéndole sus garantías ciudadanas para desempeñar cualquier puesto público.
Aplicó su estrategia de combate al narcotráfico en Ciudad Juárez, con un resultado exitoso, logrando reducir los delitos hasta en 85%, quitándole a dicha frontera el primer lugar mundial de violencia.