Indígenas de la Sierra Tarahumara, apoyados por activistas, iniciaron en los supermercados una campaña de trueque de artesanías por aceite, harina, frijol y azúcar, entre otros productos de la canasta básica, para paliar el hambre en invierno.
Juana Estrella, indígena de la comunidad de Huyochi, y Raymundo Chávez, integrante del Centro de Desarrollo Alternativo Indígena AC, instalaron un mostrador para exhibir sus wares (cestos de palma tejida) fuera de una sucursal de Alsúper, una cadena de supermercados locales donde solicitan a los clientes korima (compartir) un poco de despensa.
Explicaron que en el llamado Waretón participan organizaciones sociales y la cadena comercial, y que es una alternativa a que la gente abandone sus comunidades para pedir limosna en las calles de la ciudad
“En la sierra la gente no tiene nada. Le damos despensa y ellos pagan con sus wares –explicó Raymundo mientras repartía volantes a los clientes del centro comercial–. El cambio de wares sirve más, porque esos los hacen las mujeres; con ellos pagan la comida que les llevamos”, dijo.
En la comunidad de Raymundo, como en muchas otras pequeñas rancherías de la Sierra Tarahumara, los alimentos escasean por la sequía y las plagas que atacan las pequeñas parcelas de maíz y frijol en las montañas.
Con esta modalidad de trueque entregan un pequeño ware a cambio de tres kilogramos de frijol, azúcar o harina de maíz. Un canasto mediano cuesta cuatro kilogramos de frijol o tres litros de aceite, equivalentes a cerca de 60 pesos. De un cesto grande se pueden obtener cuatro litros de aceite o cinco de frijol, o 10 paquetes de harina de maíz.
La Jornada